Martin Scorsese es sin dudas uno de los mejores directores todavía en actividad, sino el mejor, y es ampliamente considerado entre los mejores de la historia del cine. Su trabajo se extiende desde mediados de la década de 1960 y desde temprano creo algunas obras maestras que lo convertirían en pocos años en uno de los realizadores más influyentes y significativos del séptimo arte.
La faceta documentalista de Martin Scorsese

Su obra incluye grandes clásicos del cine, desde Mean Streets, su tercer largometraje, del año 1973, pasando por Taxi Driver (1976), Raging Bull (1980), Goodfellas (1990) y Casino (1995), hasta llegar a películas más contemporáneas como Gangs of New York (2002), The Aviator (2004), The Departed (2006), Shutter Island (2010) y Hugo (2011).
Es frecuente encontrar en sus trabajos temas como la identidad italoamericana (el director es hijo de inmigrantes italianos), el crimen, la violencia y conceptos católicos como la culpa o la redención.
Además de dirigir más de veinte largometrajes de ficción (actualmente prepara The Wolf of Wall Street), Martin Scorsese ha dirigido también unos cuantos documentales que, del mismo modo que la ficción, abordan cuestiones vinculadas a sus orígenes italianos, pero también a su afición por el cine y por la música.
Ahora vamos a detenernos en esta faceta documentalista de Martin Scorsese y ver algunos de sus principales trabajos documentales.
Italianamerican (1974)
Este es el segundo documental de Scorsese (el primero, Street Scenes, de 1970, documentaba dos protestas contra la Guerra de Vietnam en Nueva York y Wahington D.C) y fue prácticamente un retrato familiar, ya que entrevistó a sus propios padres mientras cenaban en su apartamento.
Estos hablaron de la experiencia de ser inmigrantes italianos en Nueva York, entre otras cosas, como la familia, la religión o la vida en Italia después de la guerra. Su madre hasta dio su receta secreta para preparar albóndigas, que se incluyó en los créditos del film.
American Boy: A Profile of Steven Prince (1978)
En este documental se comienzan a mezclar las facetas de realizador (ya en este año de renombre) y de documentalista. En él, Scorsese aborda la vida personal de Steven Prince, un amigo suyo que interpretó un pequeño papel en su película Taxi Driver.
El personaje central cuenta historias y anécdotas de su vida, mientras se alternan imágenes caseras sobre su infancia. Una curiosidad: Steven Prince cuenta, en una de sus anécdotas, cómo debió inyectar adrenalina al corazón de una mujer que había sufrido sobredosis. Esta historia fue tomada por Quentin Tarantino e insertada en Pulp Fiction, con los personajes de John Travolta y Uma Thurman.
A Personal Journey with Martin Scorsese Through American Movies (1995)
Otro ejercicio de documental meta cinematográfico pero más decididamente enfocado en la historia del cine y las preferencias personales de Scorsese. En este el director presenta y discute una lista de sus películas americanas favoritas, dividiendo los segmentos en las diferentes clases de directores que existen, de acuerdo a Scorsese: el director que cuenta una historia, el director ilusionista, el director traficante y el director iconoclasta.
My Voyage to Italy (1999)
Probablemente el más aclamado de sus documentales, en este Scorsese mezcla sus dos pasiones: Italia y el cine. Es un viaje a través de la historia del cine italiano, donde el director discute las películas que más lo influenciaron, incluyendo emblemáticos directores italianos como Roberto Rossellini, Vittorio de Sica, Luchino Visconti, Federico Fellini y Michelangelo Antonioni.
No Direction Home (2005)
La música es otro de los elementos centrales en varios de los documentales de Scorsese, y éste, centrado en la carrera de Bob Dylan entre los años 1961 y 1966 (años en que Bob Dylan mostró picos creativos como probablemente ningún otro artista popular haya alcanzado) y en su impacto cultural, es quizás el mejor logrado.
Otros documentales musicales de Martin Scorsese son: The Last Waltz (1978), que retrata un histórico recital de The Band; la serie The Blues (2003), dedicada a la historia de este género musical; Shine a Light (2008), que muestra un recital de los Rolling Stones; y el más reciente George Harrison: Living in the Material World (2011), basado en la vida de este miembro de los Beatles.
Public Speaking (2010)
Este documental es principalmente destacable por el carisma y el atractivo de la figura que retrata: Fran Lebowitz. Esta es una escritora neoyorquina, principalmente conocida por sus agudos y sarcásticos comentarios sobre la vida moderna y sobre los Estados Unidos. El documental consiste en entrevistas a Lebowitz e imágenes sobre otros eventos en los que la autora aparece dando un discurso.









