Gravity, película alabada en todos los festivales donde se ha exhibido (incluído Venecia), en la que el mexicano Alfonso Cuarón hace un alto en la historia del cine, en una época ausente de originalidad. Unos actores en estado de gracia y la verdadera prueba de que el 3D es el futuro del cine, completan una de las películas del año, o quizás, la película.
Crítica de Gravity: Un salto en la historia del cine


La nueva 2001
A pesar de retrasarse varios meses, el mundo sabía que el director Alfonso Cuarón se traía algo grande entre manos. Con un presupuesto de 82 millones de dólares, Gravity sigue la odisea de la astronauta Ryan Stone ( Sandra Bullock) y el mecánico espacial Matt Kowalsky ( George Clooney), tras la destrucción de su transbordador, vagando en un espacio solitario y hostil buscando el modo de volver a la Tierra.
La película se estrenó en el pasado Festival de Venecia, donde fue aclamada por la crítica. La confirmación de James Cameron definiéndola como " la mejor película espacial jamás filmada" aumentaron un hype que ha explotado en excelentes críticas alrededor de todo el globo durante su estreno.
Gravity significa un soplo de aire fresco en la historia del cine, si bien su falta de comercialidad en ciertos momentos puede privarle de un target más amplio que el de otras producciones de estas características. La cinta es un lucimiento para Sandra Bullock, quien dará un vuelco a los prejuicios por parte de ciertos espectadores ,tras comprobar su cruda actuación y el realismo con el que su personaje intenta vencer las adversidades de un espacio orgánico, sin artificios, de una soledad tan bella como aterradora.

Amanecer sobre el Ganges
( Contiene spoilers)
Gravity es genial por varios motivo. En primer lugar la consagración del 3D, que permite una mayor conexión con la película, con la angustia de los protagonistas (esa lágrima que casi llega a rozarte) y la sensación de flotación en el espacio.
En segundo término sus buenos actores, si bien la aparición de George Clooney es más breve (pero igual de necesaria), permitiendo a Bullock cargar con el peso de la trama, en una interpretación cruda, con un trasfondo que justifica su apatía (Yo tenía una hija. . . ) hasta que decide luchar por su vida.
Y finalmente por su originalidad. En unos tiempos en los que las secuelas y remakes innecesarios se convierten en los mayores eventos cinematográficos se agradece una idea original y bien ejecutada.
Y es que la premisa de una mujer sola en el espacio puede resultar un argumento insustancial en un principio. Sin embargo, Cuarón desarrolla un guión que mantiene en tensión al espectador, alternando momentos de suspense y acción con otros más relajados, casi meditativos, en el que los protagonistas se permiten vislumbrar un planeta Tierra tan cercano y distante al mismo tiempo ( ¿alguna vez has visto amanecer sobre el Ganges?, le pregunta Clooney a Bullock. En la cruzada de Sandra Bullock (cuya interpretación podría valerle perfectamente una nominación al Oscar), tampoco faltan las referencias espirituales, formando un producto, ante todo, humano y realista.

Ver Gravity es como la meditación, hay que dejarse llevar. De lo contrario muchos espectadores pueden sentirse decepcionados ante la falta de elementos más propios del cine de ciencia ficción, (algo que, por otra parte, sería curioso de ver en una cinta de similares características) y un argumento más lineal que el de otras cintas del género ( la película se desarrolla durante 90 minutos reales). Los medios están ahí para permitirnos ser uno más en la travesía espacial, alcanzando los satélites de la esperanza y arriesgándonos a no terminar calcinados en ese épico climax.
En conclusión, Gravity es de las mayores sorpresas cinematográfica de los últimos años, un pulso para el espectador, desgarrador, conciso y con las dosis de acción, emoción y realismo medidas en partes iguales, comandada por una actriz que encuentra en esta cinta la oportunidad para romper los clichés de su carrera, pero que, al igual que sucedió con el 2001 de Kubrick, necesita de tiempo para respirar, contemplarse desde la distancia y el tiempo para comprobar su condición de clásico.

¿Has visto Gravity? ¿Qué te pareció?









