American Horror Story: los favores se pagan con sangre [Crítica 3x11]

Y ahora sí tuvimos un capítulo redondo en American Horror Story: Coven, que a falta de dos semanas para el final de la temporada 3, prepara un surtido de acontecimientos como antesala para la última función.

Si la semana pasada nos sorprendimos con el aterrador capítulo de Papa Legba, esta vez tuvimos un arranque demoledor que nos recordó el pasado oscuro de Madame Delphine LaLaurie ( Kathy Bates), la malvada sirvienta del Aquelarre con una fijación desequilibrada por la sangre que yace de la tortura de los esclavos negros.

El arrepentimiento de Delphine LaLaurie no fue más que una fachada para ocultar su retorcido pasado, que sale a la luz con la premisa de una narración planteada con excelencia gracias al buen gusto de su creador, que dicho sea de paso, reveló los primeros detalles de la temporada 4. Cuando quiere hacer las cosas bien, Ryan Murphy es una bestia encendida.

La sangre clama venganza

Protect the Coven es un episodio que no tiene un solo protagonista por el mismo hecho de haber reunido a casi todo el elenco de la serie. Y aunque Delphine LaLaurie volvió dispuesta a todo para liberarse del abominable hechizo que la mantiene viva, tampoco podemos obviar el esperado encuentro entre las brujas de Salem y la Orden Sagrada.

Eso quiere decir que ahora es el turno de hablar del dúo dinámico: Marie Laveau ( Angela Bassett) y la Suprema Fiona (J essica Lange), dos poderosas enemigas que decidieron formar una alianza para vencer a la Orden Sagrada, una tarea bastante sencilla. Y bueno, cómo no puede serlo si tienes entre tus filas a un hombre como The Axeman (Danny Huston), que pasó los últimos años de su vida descuartizando gente con su filuda hacha.

Hay algo que no debemos olvidar, estos dos clanes se declararon la guerra hace muchos siglos, que Laveau y Fiona duerman en el mismo techo no significa que nada pueda pasar, por el contrario, nunca se sabe lo que puede suceder en el Aquelarre.

Nadie puede escapar del Aquelarre

Me veo en la obligación de resumir el resto de acontecimientos que representan un cambio sustancial en la vida de las brujas de Coven, así que empecemos:

Madison ( Emma Roberts) resucitó de entre los muertos únicamente para causar problemas. La chica rebelde del Aquelarre tiene serias aspiraciones de convertirse en la próxima Suprema, y es casi seguro que tiene preparado un nuevo golpe de estado.

Zoe ( Taissa Farmiga) y Kyle ( Evan Peters) decidieron escapar del Aquelarre e intentar hacer una vida felices como pareja. ¿Volveremos a saber de estos dos? ¿Será el final de Zoe y Kyle en la temporada?

Spalding ( Denis O'Hare) tuvo una nueva aparición en la serie. El mayordomo más escalofriante de la televisión regresó para manipular a Delphine LaLaurie y quedarse con su muñeco viviente. ¿Hay algo más aterrador que un hombre mayor de uñas largas jugando a las muñecas?

Queenie ( Gabourey Sidibe) no ha muerto, aunque ha desarrollado una actitud agresiva y hasta se dio el lujo de alardear de sus nuevos poderes. ¿Será acaso la nueva Suprema?

Myrtle Snow ( Frances Conroy) luce siempre fantástica en Coven. Cada personaje suyo a lo largo de la serie ha sido una elección atinada, y esta no es la excepción. ¿A poco no se le ve cool cuando toca ese fantasmagórico instrumento?

Y por último está Cordelia ( Sarah Paulson), que tuvo la desdicha de ser la hija de Fiona, y en vista del terrible infierno que viven las brujas de Coven, decidió arrancarse los ojos para recobrar el poder de su visión. La escena, por cierto, hace honor al nombre de la serie.

Puntaje 9/10 No sólo fue el capítulo más sangriento de la temporada, también es uno de los más importantes por su drástico giro en la trama principal.