Si tienes algo de tiempo y eres de las que disfruta fabricando cosas útiles para su casa, no te pierdas lo que te traemos hoy; patrones para hacer un puff. Además de que siempre vienen bien para cuando tenemos visitas extras y faltan sillas, aportará a tu ambiente más decoración y será fiel a tu estilo ya que serás quien lo diseñe y acabe al 100 por cien. ¡Éxitos!
¿Tienes idea de lo que puede costar un puff? Bueno, ya te digo que unos cuantos dólares dependiendo el modelo, texturas, y marca, por eso es otro buen motivo para que hagas un puff con tus propias manos.
En primer lugar escoge una tela que sea de tu agrado y que tengas cantidad suficiente, una alternativa económica a la vez que sostenible es la arpillera.
Trabaja sobre una mesa o en el piso, fíjate donde estés más cómoda y teniendo en cuenta que la superficie debe ser plana.
¿Qué se necesita para hacer un puff?
Materiales
- Diseñar un patrón
- Tijeras
- Tape
- 2 retazos de 54 pulgadas de ancho lino de la arpillera (aproximadamente 1 metro 40 centímetros)
- 1 sábana usada o vieja de unos dos o 3 metros por 45 cm de ancho.
- Alfileres
- Máquina de coser
- 1 bobina de hilo pesado para tapicería
Para el relleno del puff
- Ropa vieja, toallas gastadas, retazos de tela
- Fibra de relleno, goma espuma picada o guata
- 1 rollo de cinta fusible
- 4 madejas de hilo de bordar
¿Cómo hacer un puff?
Tendrás que hacer un patrón o molde en papel con forma de rombo alargado con las dimensiones que deseas que tenga cada uno de los lados del puff (al final, quedaran como un rectángulo con extremidades triangulares).
Coloca cinta adhesiva sobre el molde mayor, en cada una de las uniones del mismo. Sitúa el molde de papel sobre la tela, debajo de la cual también estará la sábana y comienza a cortar siguiendo el patrón. Para que te resulte más fácil puedes prenderlo con alfileres.
Ahora repite nuevamente la operación hasta que consignas un total de 8 rombos alargados en la tela escogida y 16 de sábana.
A continuación toma un rombo alargado de sábana, dos de tela y otro de sábana, colócalos en éste orden y sujeta las 3 piezas de tela (una sobre otra) con alfileres.
A llegado el momento de coser a máquina, dejando 1 centímetro de margen comienza a coser bordeando la figura a lo largo y solo de un lado. Retira los alfileres una vez cosido. Repite el proceso con el resto.
Ahora da vuelta la tela y extiéndela, verás como queda justo en el medio la costura que has hecho. Ábrela y pasa la plancha por encima para que quede lo más plana posible.
Cose el borde de uno de los lados a otro rombo, (ahora con la tela totalmente extendida); Habrás obtenido dos mitades, a una de ellas debes darle la vuelta de adentro hacia afuera.
Ahora deberás juntar todas las mitades para formar una especie de canasta en forma de nido, que será la base de tu puff. Sujeta los bordes con alfileres y marca en donde se unan las costuras un espacio de 5 pulgadas o 10 centímetros. (Dejando entre una y otra unos 20 cm de espacio).
Ahora deberás coser todo el contorno del puff, de una marca hasta la otra, dejando el espacio que queda en medio si coser para poder rellenarlo.
¡Por fin puedes comenzar a rellenar tu puff! Dale la vuelta a la tela, y comienza colocando todo el material de relleno que sea más pesado en la zona del centro y la base, luego podrás colocar el material e relleno liviano en los bordes y en la zona superior.
Cuando llegues a la parte superior del puff coloca guata o relleno cambiando con trozos de tela, la idea es que el aspecto de tu puff quede suave y liso.
Una vez listo, cose con hilo fuerte de tapicería, sin importar que quede desprolijo.
Sobre la costura podrás aplicar un octógono realizado en la misma tela que deberás coser con una puntada decorativa o rustica según prefieras. Luego puedes aplicarla a todos las costuras del puff para que quede igual.
En vez de coser el octógono puedes coser o pegar otro tipo de cobertura que sea de tu agrado.
¿Conoces otra forma de hacer un puff? ¡Compártela con nosotros!