Marvel comics

En retrospectiva: un vistazo a Iron Man, la película que comenzó todo para el MCU

1 Dic 2017 – 12:37 PM EST

¿Cómo llegó Iron Man, un superhéroe algo menor dentro del catálogo de Marvel, mucho menos popular que otros de la compañía como Spider-Man y Hulk, a convertirse en el punto de partida para todo su universo cinematográfico?

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¿Cómo Robert Downey Jr. y su Tony Stark fueron el buque insignia de la franquicia, generando una suerte de sismo en la industria hollywoodense cuyas repercusiones se extienden hasta hoy, una década más tarde?

Primero un superhéroe y después todo lo demás

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En la década del 90, después de que el Batman de Tim Burton abriera la brecha, muchos de los grandes estudios de Hollywood estaban a la búsqueda de un nuevo éxito basado en cómics, un gran blockbuster de superhéroes.

Universal Pictures, 20th Century Fox y New Line Cinema alternaron su interés en una película de Iron Man (proyectos por los que pasaron potenciales protagonistas como Tom Cruise y Nicolas Cage y potenciales directores tan diferentes como Quentin Tarantino y Nick Cassavetes) pero finalmente todos los intentos fracasaron.

En 2006 Marvel Studios había recuperado los derechos del personaje y estaba pensando en hacer su primera película propia, y decidieron que debía ser entonces la de Iron Man, un superhéroe que hasta ese momento nunca había tenido una versión live-action en el cine.

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Pero era un personaje tan desconocido para el gran público que tuvieron que llevar a cabo una serie de focus groups para eliminar la noción de que Iron Man era un robot, y crearon además una serie de cortometrajes para ser lanzados antes de la película y familiarizar a los espectadores con el personaje (cortos producidos por Tim Miller, quien diez años después dirigiría Deadpool).

Contrataron entonces al director Jon Favreau, que había hecho las exitosas comedias Elf y Zathura: A Space Adventure, que si bien nada tenían que ver con los cómics, estaban marcadas por un tono aventurero, fantástico, divertido y juvenil.

De todas maneras, decidieron que harían una película más adulta, enfocada en la acción e inspirada sin dudas en Batman Begins y en franquicias como James Bond y RoboCop.

La idea de un universo cinematográfico tal como lo conocemos todavía no se había cruzado por la mente de nadie.

Robert Downey Jr., que estaba lentamente tratando de hacer su regreso a la primera plana de Hollywood, con su reputación un poco dañada después de varios escándalos públicos, abusos de sustancias y problemas con la ley, le pareció un buen candidato a Jon Favreau, que consideró que la película no necesariamente debía tener un actor de gran renombre o una estrella de primer nivel, ya que para él la verdadera estrella sería Iron Man, el superhéroe dentro del traje.

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Por otra parte, Robert Downey Jr. definitivamente compartía con Tony Stark varios rasgos en común, al menos la parte de una notoria y polémica vida pública, cargada de puntos altos y puntos bajos. Así que aunque Marvel inicialmente se resistió a Downey Jr. como Iron Man Favreau terminó por convencerlos.

El resto, como suele decirse, es historia conocida.

Iron Man se estrenó con un enorme éxito comercial y de crítica, Robert Downey Jr. se convirtió en una estrella mucho más grande de lo que nunca había sido, y la película se tomó como modelo para crear, primero, sagas de otros superhéroes de Marvel de similares características y, más tarde, dos secuelas de Iron Man y el evento crossover que cambiaría el cine de superhéroes, The Avengers. Todo esto con Iron Man y Robert Downey Jr. como los cimientos sobre lo que todo se construyó.

Nace un universo

El modelo de Marvel, la construcción de un vasto universo cinematográfico con historias y personajes conectados y entrelazados, se convirtió en la regla, en lo que todos los grandes estudios de Hollywood ahora quieren replicar, aunque con variado éxito y repercusión.

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La inminente Avengers: Infinity War obliga a mirar en retrospectiva el camino que ha recorrido el MCU ya que se ubica como un desenlace, una conclusión en dos partes —después queda Avengers 4— de esa extensa historia global.

Con motivo de esto, la revista Vanity Fair contactó a los responsables de Iron Man, el primer gran éxito de la franquicia, la que dio comienzo a todo.

«Había muchos aspectos en los que todo podía derrumbarse y quedar en la nada, comenzando por Iron Man» evaluó el productor Kevin Feige, la mente maestra detrás de la elaboración del MCU.

En Iron Man, Feige trabajó en conjunto con Avi Arad, en aquel entonces jefe de Marvel Entertainment y fundador de Marvel Studios.

Arad explicó cuál era la situación de Marvel antes de crear su propio estudio cinematográfico:

«Marvel tenía una muy baja autoestima en ese entonces. Los cómics eran apenas un pequeño nicho de mercado y nadie veía el valor en ellos. Nos llevó un tiempo volver a tener los derechos, que se habían gestionado de manera muy descuidada y desordenada cuando Marvel había decidido vender sus propiedades a cambios de obtener parte de las ganancias de películas de otros estudios. Para ser sincero, yo estaba aprendiendo sobre el negocio de las películas live-action. Kevin [Feige], que estaba trabajando junto a Lauren Shuler Donner [en las películas de X-Men], fue básicamente el que me iba explicando qué era lo que estaba sucediendo o lo que iba a suceder en lo que refería a películas»

En ese momento Marvel Studios funcionaba como productora de las películas basadas en Marvel Comics (las de la saga X-Men, las Spider-Man de Sam Raimi, Daredevil y Elektra, la Hulk de Ang Lee y las primeras adaptaciones de Fantastic Four, etc.) pero no tenía control creativo sobre ellas, el que ejercía Fox o Sony dependiendo de la franquicia.

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Feige reconoce que en su período como productor de Marvel entre 2000 y 2007, antes de crear sus propias películas, hubo películas que fueron muy malas, pero asegura que ellos realizaban sugerencias y los estudios no los escuchaban. Según Favreau:

«Lo que los estudios hacían era ignorar al núcleo de fans, los que conocían los cómics, bajo el razonamiento de que éstos solamente representaban una fracción pequeña de la potencial audiencia de la película, y preferían centrar su enfoque en una audiencia más masiva. Kevin había experimentado muchas veces la frustración de que el estudio ignorara estas preocupaciones que le presentaba»

Feige agrega:

«No teníamos el control y yo odiaba eso. Si algo no va a funcionar prefiero que sea porque tuvimos una idea que nos pareció que sería buena y resultó que no, a que sea porque no pudimos convencer a alguien que toma decisiones de hacer una determinada cosa»

Esta frustración de Kevin Feige lo llevó a comenzar a fantasear con hacer sus propias películas, sin injerencias externas.

«Siempre pensé que nosotros seríamos capaces de hacer nuestras propias películas, al menos desde el punto de vista creativo. Desde el punto de vista financiero era algo muy diferente, pero de eso se encargaron Avi Arad y David Maisel que lograron armar un plan para dar a luz Marvel Studios»

La decisión de hacer Iron Man

Una vez que decidieron tomar el control creativo de las películas basadas en los cómics de Marvel, y crearon Marvel Studios, se enfrentaron a un primer problema, según rememoró Feige:

«No teníamos a Spider-Man. No teníamos a los Fantastic Four. Solamente teníamos a “los personajes clase B” —ese fue un famoso titular en la época, creo que del L.A. Times—. Nosotros nunca lo vimos así. A mí Iron Man siempre me había parecido genial, y además teníamos a Hulk que es, probablemente, nuestro personaje más grande después de Spider-Man. Sabía que teníamos potencial. Pero el objetivo inicial era sencillamente hacer la mejor película de Iron Man que fuera posible. La película no fue eso. Fue el comienzo de una saga cinematográfica de 22 películas»

Tal vez el destino lo marcó, sin saberlo e involuntariamente, un fan que en la Comic-Con de 2006, cuando los creativos de Marvel se presentaron para anunciar la película de Iron Man, se le ocurrió preguntar si era posible ver en un futuro la película The Avengers.

Marvel Studios no tenía ningún plan al respecto pero esa simple idea en la mente esperanzada de un fan germinó tal vez, lentamente, en los ejecutivos de Marvel Studios, hasta pasar de ser una utopía a una realidad..

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Una película independiente

El cine de superhéroes en 2008 parecía comenzar y acabarse con lo que había hecho Christopher Nolan en The Dark Knight.

Definitivamente no era una apuesta segura lo de Iron Man, una película muy diferente.

Según Jon Favreau:

«La gente desconfiaba de Marvel y además parecía que el género de superhéroes ya se estaba agotando. Tenías The Dark Knight, que había arrojado una gran sombra a su alrededor, pero todo esto parecía muy ligado a esa propiedad en particular y a Christopher Nolan. El calibre de superhéroes que nosotros estábamos pensando en traer a la pantalla, no era un éxito garantizado»

Feige:

«Marvel no tenía tanto dinero. La gente se olvida que Iron Man fue una película independiente. Yo tuve que hacer de todo. Le tuve que proponer la idea de la película decenas de veces a compradores extranjeros, porque un gran porcentaje de la financiación venía si asegurábamos su venta en el exterior»

Robert Downey Jr. tenía sus dudas sobre el proyecto, como todo el mundo, pero finalmente se disiparon:

«La primera vez que pensé que la película iba a funcionar fue en aquel panel en el Comic-Con, cuando reprodujeron las primeras imágenes de la película. Los fans me lo hicieron saber. No fui yo el que descubrí que iba a funcionar, ellos me lo hicieron saber. Y luego yo actué en plan “pues claro, les dije que iba a funcionar”»

Favreau, en cierto modo, se adjudica parte del éxito de todo el MCU:

«Con Iron Man llegamos a descubrir un tono que se convertiría en la fórmula de ahí en más. Esa mezcla de grandes actores, mantenerse fiel a los personajes, delinear un universo combinado que te permita una cruzar los diferentes elementos. Y también tener humor y fidelidad al canon»
  • Ver también: «12 frases que evidencian el ingenio y la ironía de Tony Stark»
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Sobre la escena poscréditos y la «iniciativa Avengers»

Jon Favreau:

«Cuando decidimos incluir a Nick Fury, pensamos que sería divertido que lo hiciera Samuel L. Jackson, ya que era en quien se había basado el personaje en su versión Ultimate»

Kevin Feige:

«Incluso si la idea de The Avengers surgió en aquella Comic-Con, el objetivo en 2008 era hacer nada más que dos películas que, con suerte, fueran lo suficientemente exitosas de modo que pudiéramos seguir haciendo otras. No lo veíamos como plantar las semillas para un gran universo. A Samuel L. Jackson lo incluimos en esa escena de los créditos simplemente porque pensamos que sería divertido. Pensamos que sería genial que viniera Sam Jackson a decir algo como, eres parte de un gran universo, sólo que todavía no lo sabes»

Favreau:

«Para mí era simplemente un divertido easter egg para los fans que se quedaban hasta después de los créditos. Pero en ese punto Kevin estaba definitivamente muy involucrado en toda la producción. Porque eso que Sam Jackson dice sobre la “iniciativa Avengers” era una forma de prender la mecha. Mientras para mí todo no era más que una excusa para generar una reacción en el público, Kevin estaba pensando en otra cosa»

Feige:

«Lo pusimos al final de los créditos para que no distrajera al público en la película y la gente se preguntara qué demonios hacía Samuel L. Jackson apareciendo de repente. Pero también pensé que podría dar inicio a una potencial conversación entre los fans más entusiastas, que pensaran “espera un momento, esto no querrá decir que...”. El lunes después del estreno un nota de prensa ya estaba discutiendo sobre Nick Fury, quién era y qué podía significar su presencia. Todo explotó mucho más rápido de lo que esperábamos»

Favreau:

«Cuando estábamos haciendo Iron Man 2, la escena de los créditos [Phil Coulson reportando haber encontrado el Mjolnir] nos llegó desde el set de Thor. Era raro tener anexado un trozo de película que yo no había dirigido, aun si estaba después de los créditos. En ese momento era difícil comprender el verdadero alcance que tenía todo esto»

Feige:

«Fue después del estreno de Iron Man que nos dimos cuenta de que a) íbamos a poder hacer más películas de éstas, y b) que podíamos conectarlas entre sí»

Favreau:

«Fue maravilloso pero desconcertante. Todo cambió con el enorme éxito de Iron Man. Es como si fueras una banda que saca una canción y resulta ser un gran hit. Pasas de tocar en un garaje a ver cómo sigues con todo eso. Ahí fue cuando Kevin realmente comenzó a hacerse fuerte y descubrió cuál era el camino. Realizó ajustes a The Incredible Hulk para hacerla más similar a Iron Man y también se las arregló sobre la marcha para incluir a Robert Downey Jr. en esa película. Es como que tuvo la perspicacia para entender la gran oportunidad que se extendía ante él. Era mucho más consciente de todo lo que significaba esto que yo en ese momento»

Feige:

«Cuando estábamos haciendo la película de Thor todos me preguntaban: ¿Pero esta película va a estar en el mismo mundo realista de Iron Man? ¿Cómo va a funcionar eso? Yo les explicaba que Iron Man no era tan realista. Iron Man construye su propio traje de metal. Dispara dentro de una cueva y anda por ahí volando»

Kevin Feige, finalmente, también ofrece su consejo a aquellos que están intentando imitar el éxito del MCU haciendo sus propios universos cinematográficos:

«Siempre se trata de la película que estás haciendo en ese momento. En Marvel Studios todos saben que lo importante es esa película por encima del panorama general de la franquicia. Mi consejo es: no te preocupes por el universo. Preocúpate por la película. Nosotros nunca nos propusimos crear un universo cinematográfico. Nos propusimos hacer una gran película de Iron Man»

Terminaron haciendo las dos cosas.

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