Habitual de los mares asiáticos, el considerado como segundo animal vertebrado más venenoso del mundo (solo por detrás de la rana dorada) es un pez caracterizado por un cuerpo que se hincha ante el miedo o como defensa para protegerse de los depredadores, dotándolo de un aspecto tan simpático... como letal.

Protegido en el interior de esa anémona purpura con la que establece una de las simbiosis más curiosas del reino animal, el pez payaso avista cuidadosamente los peligros del mar y, cuando lo cree oportuno, deja lucir sus colores anaranjados entre los multicolores del pez loro o el brillante de los peces luna.

El agua se considera una fuente de vida y riqueza, inspiradora de formas y matices, renovadora de energías en su curso y uno de los cuatro elementos de este mundo en el que vivimos.

Muchos habrán descubierto alguna que otra medusa en las playas durante el último verano y, posiblemente, hayan sufrido algún encuentro poco apropiado con estas temidas moradoras del mar, cuyo encanto estético no se les escapa a los mejores tatuadores.

Estrenada en 2003, Buscando a Nemo es una de las películas más taquilleras y adoradas del cine de animación. Una cinta que nos permitió sumergirnos en las profundidades de la Gran Barrera de Arrecife de Australia gracias a personajes como el pez payaso Marlin, su desaparecido hijo Nemo, el tiburón Bruce, la tortuga Crush o, especialmente, la mítica Dory, un cirujano azul con perdida de memoria a corto plazo. Personajes e historias que también inundan las pieles de algunos fanáticos de la película de Pixar, una fiebre que reflejan estos 10 tatuajes inspirados en Buscando a Nemo.

Aprovechando las cálidas temperaturas del hemisferio sur, seguro que muchos de vosotros se disponen a disfrutar de la playa y de esas sesiones de snorkeling en las que maravillarse con cantidades de peces tropicales.