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En esta era en la que casi nadie tiene tiempo para perder el tiempo, muchos han descubierto que la mejor hora para dedicarle al ocio despreocupado de mirar una serie, mirar una película o leer, es precisamente ese momento de calma y tranquilidad en el que nos sumergimos antes de ir a dormir cada noche.

No hay nada como sentarse una tarde a disfrutar de una telenovela atrapante. Hay algunas muy largas, otras más dramáticas, pero siempre encontramos aquella con los protagonistas que tanto llaman nuestra atención y nos emocionan.

¿Recuerdas cuando ver televisión tenía un horario y un día fijo y la única forma de hacerlo era sentado en el sofá enfrente del televisor en tu casa? Sí, la prehistoria.

El verano es la época para disfrutar del aire libre y del sol, de los amigos y de los espacios naturales, pero todos los que disfrutamos de las series de televisión sabemos también que siempre hay tiempo para dedicarle a la nueva serie que nos ha enganchado, y disfrutar con mesura y prudencia de una buena maratón de varios capítulos que nos mantenga prendidos a la pantalla por varias horas olvidándonos de otras pequeñeces como comer y dormir. Es que hay series muy adictivas.

Lo más cerca que podemos estar de ver en la TV la épica, los enfrentamientos, las sorprendentes vueltas de tuerca, los villanos y las increíbles sagas heroicas de la ficción, es en los eventos deportivos.