¡Las empanadas son deliciosas! Lo que sucede a veces es que nos olvidamos que también existen las empanadas dulces para comer como postre y que, si bien diferentes, son tan ricas como las empanadas saladas tradicionales.

Hace poco tiempo les había propuesto unas ricas empanadas dulces de manzana y canela para disfrutar por las tardes. Hoy la propuesta no es muy diferente, pero sí he cambiado la manzana como ingrediente principal para utilizar unos frescos y deliciosos arándanos.

Las empanadas de manzana, del inglés "Apple Turnovers", constituyen un clásico acompañante de una taza de té e incluso café. Es común servirlas calientes, recién salidas del horno, con su interior (ese delicioso relleno de manzanas con especias que no tiene comparación) todavía humeante.

La masa para pie (conocida también como masa quebrada o masa muerta) puede elaborarse y dejarse en el congelador por un tiempo prolongado, pues a diferencia de otros alimentos tiende a mejorar después de la congelación. Solo debemos cuidar que esté bien cubierta durante ese período de conservación para que no sufra quemaduras por frío, para eso le podemos dar una forma cilíndrica y la cubrimos con plástico transparente del que se emplea para alimentos.

Para postre, para merendar o para la hora del día que más te guste, estas empanadas de cerezas son sin duda una verdadera delicia y realmente simples de preparar. Además, tienen tan solo 244 calorías cada una por lo que si estás cuidando tu figura podrás comer sin culpas.

Si eres fanático de las empanadas, seguramente te gusten tanto las saladas como las dulces. Si hablamos de dulces, las más comunes son las de chocolate o dulce de leche, pero si quieres algo diferente, puedes preparar estas empanadas rellenas de crema pastelera y frutillas, que son una perdición.