Rosmery Baten tiene 9 años y desde que nació ha tenido que afrontar la vida sin piernas y un brazo que solo tiene dos dedos. A pesar de las adversidades físicas y la pobreza en la que vive en Guatemala, la familia de esta pequeña le ha enseñado a moverse por su cuenta y a ayudar con las labores del hogar. Su sueño es ser maestra y busca ayuda para tener piernas protésicas. No dejes de ver:
Se convirtió en madre a los 15 años y pide ayuda para alimentar a sus hijos: ha pensado en quitarse la vida.