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Apuñaló a su exnovia y le prendió fuego: dijo a la policía que la mató porque creía que era una "bruja"

Kelli Ranning Goodermont, de 44 años, era madre de tres hijos, y había mantenido con su presunto asesino una relación intermitente por casi 10 años. Fue asesinada mientras estaba trabajando como recepcionista en un almacén.

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Kelli Ranning Goodermont, de 44 años, estaba en su trabajo como recepcionista en un almacén el martes cuando su exnovio, Patrick Morris Simmons, la golpeó, apuñaló y le prendió fuego.

Goodermont era madre de tres hijos y había pedido una orden de restricción el verano pasado en contra de su expareja, a quien acusó de abusos y de aislarla de sus seres queridos.

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Los hechos ocurrieron en St. Paul, Minnesota. Un compañero de trabajo de la mujer dijo que Simmons, de 37 años, llegó al almacén donde laboraba y comenzó a golpearla y apuñalarla.

Cuando Goodermont yacía en el suelo, el presunto agresor le roció acelerante de fuego antes de prender su cuerpo en llamas. Otro compañero de trabajo dijo a las autoridades que apagó el incendio con un extintor mientras Simmons se dio a la fuga. Posteriormente fue arrestado.

En declaraciones juradas ante las autoridades, el hombre dijo que sospechaba que Goodermont “era una bruja” y afirmó que cometió el crimen “para defender a los bebés asesinados y sacrificados con brujería”.

Las autoridades informaron también que el hombre aceptó que había conseguido la gasolina con anterioridad, lo que agrava el crimen por haber sido premeditado. El sospechoso dijo a la policía que también intentó quemar la casa de la mujer porque “ahí había actividad paranormal”.

El sospechoso fue acusado por asesinato intencional en segundo grado. Goodermont y su presunto asesino habían mantenido una relación intermitente durante casi 10 años, según la emisora WCCO, quien también entrevistó a Traci Kennedy, una de las mejores amigas de Goodermont.

Kennedy dijo a la cadena que la tragedia no le había tomado por sorpresa. "Desgraciadamente, no fue demasiado sorprendente que [Simmons] hiciera esto y llevara las cosas a este grado", explicó. "Ahora lo más importante es entender qué pasó para que no vuelva a ocurrir, qué hacemos para que nuestras hijas no caigan en estos ciclos".

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También afirmó que deseaba que Goodermont fuera recordada como "la luz" que era. "Quiero que su recuerdo traiga sonrisas como siempre lo hizo antes de que todo se volviera tan oscuro. Era el tipo de chica que podía entrar a un cuarto y lo iluminaba con sus comentarios ingeniosos", relató su amiga. "La quiero mucho y solo quiero, solo queremos, justicia para su familia".