Fuentes vinculadas al estudio indican que el voluntario, que participaba en los ensayos de la vacuna contra el covid-19 de la Universidad de Oxford y el laboratorio AstraZeneca, un hombre de 28 años y residente de Río de Janeiro, no habría recibido una dosis de la vacuna sino una inyección de placebo. Expertos advierten que "puede haber muchas causas por las que alguien puede fallecer y no necesariamente tienen que estar relacionadas con la vacuna".
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