El gobernador Andrew Cuomo señaló que las máscaras serán obligatorias en los lugares donde no sea posible mantener la distancia social, incluyendo supermercados, aceras y transporte púbico. El estado permanece en alerta por la cantidad de contagios y hospitalizaciones, a pesar de que las muertes han disminuido levemente, por lo que se habilitarán más sitios para realizar pruebas de la enfermedad.