Un grupo de migrantes venezolanos cruzó el Río Grande cargando una enorme bandera de Venezuela como señal de protesta para exigirle al gobierno de Estados Unidos que les permita solicitar asilo dentro del país. Sin embargo, luego de que las autoridades les pidieran que se retiraran, la situación se tornó violenta y los oficiales utilizaron proyectiles para control de multitudes. "Me dispararon una vez y otra vez", denunció uno de los indocumentados.
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