Se estima que cerca de 40,000 empleados de las dos aerolíneas se vean afectados, ya sea recibiendo notificaciones de despidos temporales o su pérdida total del trabajo. Los viajeros temen que, con la decisión, el servicio empeore drásticamente. La crisis también provocará el cierre de vuelos a múltiples destinos del país, lo que podría afectar hoteles y otras industrias de servicio, generando aún más desempleo.
Más información aquí.