Luego de que el presidente Nayib Bukele autorizara el uso de la criptomoneda para realizar pagos en el país, se han conocido diferentes opiniones. Un grupo de manifestantes destruyó una caseta y un cajero electrónico en señal de protesta, asegurando que “no están de acuerdo” con su implementación. Mientras tanto, otro sector de la población afirma estar preparado para esta forma de pago, ya que consideran que “el presidente no nos va a hacer un daño”.
Más noticias aquí.