La abuela de Carlos Adrián Ingram, de 27 años, llamó a la policía porque supuestamente él estaba ebrio y corría desnudo por la casa, pero los tres uniformados que llegaron lo esposaron y lo tuvieron boca abajo por 12 minutos, hasta que dejó de respirar. El hecho sucedió el 21 de abril, pero la imágenes se conocieron esta semana. El jefe de la policía de Tucson, Arizona, presentó su renuncia.
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