Un asilo de ancianos en Washington es el lugar donde esta enfermedad ha cobrado más vidas en EEUU y aún se desconoce cómo comenzó el contagio. En San Antonio, Texas, salió de una base militar una persona que estaba en cuarentena y que más tarde dio positivo al virus. Por otro lado, en Florida, una mujer aseguró que los médicos le dijeron que era probable que tuviera el coronavirus, pero no le practicaron pruebas, terminó enferma y contagió a su esposo.