En Brownsville, Texas, las fronteras son difíciles de definir. La mano de los carteles de drogas en México toca inevitablemente la vida de los jugadores de futbol americano en las secundarias. Estas son las historias de Joe, un ciudadano estadounidense cuyos padres están en prisión por tráfico de drogas, y Jhonatan, un inmigrante de Matamoros sin papeles que llegó a este país huyendo de la violencia. Para ambos, el futbol es un escape de sus problemas.