Familiares de fallecidos ponen en duda las muertes del huracán reconocidas por Puerto Rico

La polémica lista de víctimas de María en la isla, que ya va por las 55 personas, sigue sin convencer a algunos boricuas, pues aseguran que el gobierno se rehúsa a incluir a sus familiares como fallecidos a causa de la tormenta.

Video "Mi hermanito se fue": Familiares de fallecidos cuestionan las muertes del huracán reconocidas por Puerto Rico

Anthony Alicea Bracero murió el 6 de octubre tras el paso del huracán María por Puerto Rico. Su cuerpo fue cremado. Tenía 28 años.

En el Hospital Doctor Center de Manatí, indicaron que su muerte fue natural y que la causa fue un fallo respiratorio.

PUBLICIDAD

Pero su padre, Juan Alicea, estaba convencido que su hijo, a quien describió como un joven "corpulento y saludable", no murió por esa razón y exigió que le hicieran una autopsia. En un principio el hospital se negó, pero el ingeniero químico retirado se impuso y logró que el cadáver de su vástago fuera trasladado al Instituto de Ciencias Forenses (ICF).

Aunque los resultados de la autopsia tardarán entre ocho meses y un año, su familia grita a los cuatro vientos que su fallecimiento fue a causa de la leptospirosis, enfermedad que se transmite de animales a los humanos.

Fue precisamente un empleado del ICF quien informó a la funeraria que Anthony murió por leptospirosis y recomendó que se lo dijeran a la familia para que tomaran medidas cautelares y de higiene, pues el joven dejó huérfano a un menor de 9 años.

El caso de Anthony es uno de muchos que el gobierno no incluye en su lista oficial de muertes directas e indirectas certificadas, que actualmente es de 55, cuatro de ellas por leptospirosis.

Gobierno no reconoce epidemia

La madre de Anthony, Zulma Bracero, nunca se va recuperar del embate del ciclón. Su vida jamás será la misma, reconoció ante las cámaras de Univision Noticias.

"Es un vacío muy fuerte", dijo con voz entrecortada por el llanto.

Bracero, quien es empleada de una farmacéutica en Vega Baja y tiene conocimiento básico en aspectos de salud, también está convencida de que su hijo murió tras haber tocado madera contaminada con orín de ratón en su trabajo. Narró que su hijo trababa regularmente operando los vehículos para cargar paletas, pero que el lunes 2 y martes 3 de octubre lo pusieron a trabajar reparando paletas averiadas y rotas por el paso del poderoso huracán.

Video La clínica de Chaco: cómo un grupo de doctores voluntarios atienden a los enfermos de Puerto Rico

"Él fue a trabajar dos días a la platera y, precisamente el lunes, él llegó sintiéndose mal y me dijo, 'Mami, me siento bien ansiado y me siento que no puedo respirar bien'. En el hospital le hicieron análisis de sangre, le hicieron una radiografía y le dijeron que tenía pulmonía. Pero él siguió sintiéndose mal y cuando vino el infectólogo le hicieron más análisis y descubrieron que las enzimas hepáticas habían salido bien altas. Yo le pregunté (al doctor) qué podía ser y me dijo, 'Estamos descartando porque salió con septisemia y tenemos que verificar qué tipo de bacteria es'. Luego me dijo que él creía que era leptospirosis porque tenía la piel amarilla", recordó la madre, sobre las horas antes de la muerte del joven.

PUBLICIDAD

Afirmó que el único lugar en el que se pudo contagiar con la mortal bacteria fue en su trabajo, pues en su residencia aún no han recogido los escombros dejados por el fenómeno atmosférico.

Anthony ingresó en el hospital el miércoles 4 de octubre y murió 32 horas después.

"El único lugar que él fue que tocó madera fue allí", sostuvo.

Bracero hizo un llamado al gobierno para que admita que hay una epidemia de leptospirosis en la isla, no para alarmar al público, sino para alertar a los ciudadanos y hospitales de forma tal que se salven vidas.

"Ante la difícil situación que el país está atravesando, se debe solicitar a los doctores que toda persona que llegue a un hospital con síntomas de un catarro o un virus que lo primero que le puedan hacer sea la prueba de esa bacteria de leptospirosis porque solo hay 72 horas", reclamó.

Hay 121 casos sospechosos de leptospirosis que ya dieron positivo en las pruebas rápidas, pero el gobierno ha enviado un número menor a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).

La epidemióloga del estado, Carmen Deseda, dijo a Univision Noticias que las muestras se están tomando, pero tampoco ha querido reconocer que hay una epidemia.

"Las muestras se han tomado y las muertes están siendo evaluadas si son bajo sospecha", indicó la doctora.

'En el hospital no había luz'

En Ponce, Flavio Rodríguez pasó una tortura luego que su abuela ingresó al Hospital San Lucas, a la unidad de intensivo, luego de haber sufrido una caída y fracturarse una cadera dos días antes del huracán.

PUBLICIDAD

La anciana tenía 89 años cuando murió el 22 de septiembre, dos días después del paso de María. Pero tampoco aparece en la lista oficial de muertos reconocidos por el gobierno.

"Le ponen unos medicamentos para aliviar los dolores, para bajarle la ansiedad y poderle hacer unos estudios. Cuando sale del estudio, que despierta del medicamento que le habían puesto, se levanta diciendo incoherencias. Se levantó malita, le ponen otro medicamento y ahí es que viene el paro cardiaco. Le dan resucitación y ahí la suben a intensivo y de intensivo no salió", narro Rodríguez.

El cuerpo de su abuela también fue cremado en el ICF.

"Yo fui a verla el jueves, el día 21, y ya yo la veía que estaba malita. En el hospital no había luz, no había nada. Incluso ella estaba en la camilla y para mantenerla fría le estaban poniendo bolsas de hielo debajo de los brazos, en la coyuntura en la cama. Cuando yo la vi, ya sabía que había muerto por el color y por las facciones. Tú te das cuenta", destacó el vendedor de autos.

Rodríguez está convencido que las condiciones del hospital por la falta de luz precipitaron la muerte de su abuela, a quien llamaba "Mami". En el ICF, no lo dejaron identificar el cadáver porque ya "estaba en estado de descomposición".

La causa de la muerte: un fallo respiratorio. Lo mismo que hicieron en el caso de Anthony.

Una residente de Aguada que prefirió no ser identificada acudió al ICF a tratar de identificar a su padrastro, pero por no ser familiar de sangre no pudo hacerlo.

La mujer señaló que a su padrastro le habían amputado un dedo del pie y, posterior a eso, se sacó la sonda, por lo que fue llevado de emergencia a un Hospital San Carlos, en la región oeste del país, y luego fue trasladado al Centro Médico de Mayagüez, donde le amputaron la pierna.

PUBLICIDAD

"Para el tiempo del huracán, como se puso la situación bien difícil, fue trasladado a la sala de intensivo del Hospital de la Concepción, desde donde lo trajeron a Forense", declaró la vecina de Aguada, que no quiso identificarse porque hacía gestiones con las Fuerzas Armadas estadounidenses para que se hicieran cargo del sepelio, pues el hombre era veterano.

La familia se enteró de su muerte 10 días después del huracán.

'Forense cremó todos los cadáveres'

El alcalde del municipio de Villalba, Luis Javier Hernández, también cuestionó la cifra de muertos que el gobierno reconoce. En el caso de su ayuntamiento, Henández afirmó que hubo cuatro muertes, pero el gobierno solamente reconoce una de ellas.

"Las personas murieron porque no pudieron llegar a tiempo al hospital o porque no pudieron recibir a tiempo su tratamiento, oxígeno y, ciertamente, tienen que catalogarse como muertes relacionadas al huracán. Y no te estoy hablando de oído, te estoy hablando de lo que vivimos aquí. El gobierno autorizó más de 900 cremaciones y dice que fueron por causas naturales y eso no debe ser correcto. Las muertes de las primeras dos semanas se tienen que tomar con mucha cautela porque Ciencias Forenses no tenía la capacidad de atender todos los muertos que estaban llegando. Forense cremó todos los cadáveres y escondió esa información", sostuvo el ejecutivo municipal.

"El país sufrió una catástrofe y en medio de esa catástrofe muchas personas murieron que, lamentablemente, no van a aparecer en la historia relacionadas con el huracán, cuando realmente sí lo fueron", sentenció.

PUBLICIDAD

Los CDC han confirmado cuatro muertes relacionadas a leptospirosis. Se habían enviado 70 muestras de 35 pacientes, de las cuales 13 dieron positivo. Como se informó, cuatro fueron muertes certificadas y nueve son pacientes que están hospitalizados o ya fueron dados de alta, declaró el jueves el secretario de Asuntos Públicos de la Fortaleza, Ramón Rosario.