"Me opongo a cualquier muro que intente separarnos": Gael García Bernal protagoniza un poderoso momento anti-Trump en los Oscar

El actor mexicano Gael García Bernal era, junto a Salma Hayek, el único presentador latino en unos Oscars con ausencia de representación hispana. La gala transcurría con menciones veladas a Trump, salvo por la poderosa declaración que leyeron en nombre de Asghar Farhadi, el director iraní ganador del premio a mejor documental que no asistió por respeto a su país y a los otros 6 países musulmanes a los que Trump prohibió la entrada en enero.

En una gala que prometía ser una declaración contra Trump, pero que hasta el momento solo ha ofrecido ligeras alusiones al presidente y sus políticas, Gael García Bernal tomó el micrófono junto a la actriz Hailee Steinfeld para presentar el mejor corto animado, una categoría menor en estos premios. Aprovechando su momento en el escenario el actor se posicionó contra el muro que Donald Trump amenaza con construir en la frontera de México: "Como mexicano, como latinoamericano, como trabajador migrante, como ser humano, estoy en contra de cualquier pared que quiera separarnos", dijo. En ese momento la ovación fue cerrada y algunos de los presentes incluso se levantaron de sus asientos para aplaudir al actor.

“Los actores de carne y hueso somos trabajadores inmigrantes", dijo el actor haciendo alusión al premio que presentaba, mejor corto de animación. "Viajamos por todo el mundo. Construimos familias, construimos vida pero no podemos ser divididos", continuó el actor.

Gael García Bernal ha sido beligerante contra las políticas de Trump desde que estas eran una propuesta electoral y siguió manifestándose contra ellas una vez se confirmó que Donald Trump sería presidente. Ha contribuido a reírse de ellas, haciendo crítica del muro a través del humor, pero también ha sido directo arremetiendo contra Trump y el muro en su cuenta de Twitter y en entrevistas donde no esquiva referirse al ahora presidente de Estados Unidos como "caso perdido".

El activismo de Gael García Bernal no comienza con Donald Trump. En 1994 apoyó las manifestaciones en favor del movimiento zapatista tras el levantamiento armado en Chiapas. Además de su implicación política, el actor llevó el activismo a su campo, el cine. Con su amigo y colega Diego Luna fundó una productora para financiar y dar voz a cine mexicano independiente que de otra forma no encontraría forma de realizarse y distribuirse. Además ha escogido contar historias con interés en su comunidad, como 'Desierto', una historia de inmigrantes, que Gael accedió a rodar con la condición de que comenzaran rápido la grabación pues el actor quería enclavar el filme en un momento de odio anti-inmigrante que ya resonaba entre los norteamericanos.

estas razones han aupado a Gael como uno de los defensores de los inmigrantes latinos, y así lo demostró otra vez en la 89 edición de los premios Oscar.