Casi la mitad de los estadounidenses sufre de algún tipo de alergia estacional, según la Fundación Americana del Asma y las Alergias. Entre sus síntomas están el lagrimeo ocular, el flujo nasal, los estornudos y la irritación ocular. Por suerte, hay formas de mitigarlos sin recurrir a los fármacos, aunque siempre es mejor consultar antes al médico de confianza.