Una empleada doméstica, identificada como Marites Fortaliza, pasó tres días encerrada al atascarse el elevador del millonario de Nueva York para quien trabaja hasta que fue rescatada este lunes por los bomberos. La mujer no tenía ningún teléfono para comunicarse con el exterior y la familia para la que trabaja estaba fuera de la ciudad.
Una empleada doméstica pasa tres días encerrada en el ascensor de la casa de su jefe
Marites Fortaliza, de 53 años, se quedó atrapada el viernes y no fue rescatada hasta el lunes. La familia para la que trabaja, la del magnate Warren Stephens, se marchó de Nueva York por el fin de semana y no fue hasta que un repartidor fue a llevar una cosa al edificio que descubrieron que se quedó entre los pisos dos y tres.

El incidente ocurrió en un edificio de cinco plantas del elegante barrio Upper West Side de Manhattan que pertenece al inversionista Warren Stephens, según el diario The New York Times.
El ascensor, que aparentemente pasó una revisión el pasado verano, se quedó varado entre el segundo y tercer piso. Según el diario, los propietarios de la casa enviaron a un familiar al edificio luego que fueron alertados por una persona que fue a la dirección para realizar una entrega. Dicho familiar avisó a las autoridades.
Un portavoz confirmó que los bomberos fueron llamados a esa casa de ladrillos rojos de la calle 65 a las 10:00 am de la mañana del lunes luego que los propietarios constataron que el ascensor estaba dañado.
Los bomberos constataron que el elevador estaba detenido entre el segundo y el tercer piso. Forzaron su puerta y encontraron dentro a una persona que dijo que estaba allí desde el viernes, dijo el portavoz.
Esa persona estaba aparentemente en "buen estado" de salud, pero igualmente fue trasladada al hospital James Long para ser examinada, indicó.
Los bomberos no dieron más detalles ni revelaron la identidad de la mujer.
No obstante, medios de Nueva York la identificaron como Marites Fortaliza, de 53 años, empleada doméstica de la familia Stephens desde hace varios años.
Al llegar el viernes a la casa, la familia había salido a pasar el fin de semana en otro lugar, quedó atrapada en el elevador y no pudo llamar a nadie.
La firma Stephens Inc. no ha hecho comentarios hasta el momento. Sin embargo, en un comunicado citado por el diario The New York Post, la familia Stephens prometió "investigar las causas de este desgraciado incidente" y tomar "las medidas adecuadas para asegurar que no se repita". Según un vecino citado por dicho medio, la mujer no tiene intención de demandar a la familia
Se ignora si el ascensor contaba con un sistema de alerta de emergencia.
El edificio, construido en 1920 lo compró Stephens en 1999 por ocho millones de dólares.
Warren Stephens es un multimillonario que posee una empresa de inversión y que, según la revista Forbes, en 2018 estaba considerado como el estadounidense 302 más rico en 2018, de un total de 400 listados por dicho medio. Forbes considera que su fortuna está valorada en torno a los 2,700 millones de dólares.








