Nutrición
Insectos, algas, flores o ‘carne’ vegetal: los productos que comeremos en el futuro (y que podrías probar de una vez)
El futuro de la humanidad podría estar en el consumo de insectos, que constituyen el 80% de las criaturas del planeta. Además de sostenibles, son sanos. Si esta opción te desagrada, aquí presentamos otras tendencias.

Al rico insecto. Todo son ventajas cuando se trata de insectos: hay 1.900 especies comestibles conocidas en el mundo; contienen proteínas y grasas saludables; la cría emite menos gases de efecto invernadero que la ganadería y podrían convertirse en una fuente de ingresos para los países en vías de desarrollo. El principal escollo es, claro, que no todo el mundo está dispuesto a meterse chapulines en la boca.
iStock
Los insectos forman parte de la dieta tradicional de cerca de 2.000 millones de personas en todo el mundo, según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés). Bitty, una empresa con sede en San Francisco, ya comercializa aperitivos a base de grillos como el de la fotografía. Desde principios de este año, la regulación de la Unión Europea ( llamada Novel Foods ) incluye los insectos en su lista de productos aprobados para la venta y consumo.

La hamburguesa imposible. The Impossible Burger es justo lo que su nombre indica. Una hamburguesa que no es una hamburguesa (porque no está hecha a base de plantas, sino de carne) pero que se acerca tanto que resulta difícil distinguirla (o al menos eso aseguran los que lo han probado).

El objetivo es “conseguir que el sistema global de comida sea más sostenible”, según dice el fundador de la empresa, Patrick O´Brown. De momento solo puede degustarse en un puñado de locales de EE UU, pero el plan es que se extienda por muchos más restaurantes. ¿Por qué la carne sabe a carne? Sus creadores pasaron años investigando para recrear los sabores, texturas, aromas y nutrición de la carne picada, pero utilizando únicamente plantas.

Tofu, Seitán, Tempeh y soja texturizada. Mientras esperamos a que la hamburguesa imposible llegue a nuestro restaurante favorito, podemos aprovechar el tofu, el tempeh, la soja texturizada (los tres elaborados con semillas de soja, aunque de texturas distintas) y el seitán (elaborado con gluten de trigo). Cada vez son más populares en la cocina vegetariana y vegana por su gran versatilidad.
iStock
El futuro es vegetariano. En el último año, las búsquedas en Google de artículos relacionados con el vegetarianismo han crecido un 90%, según la consultora Baum+Whiteman, especializada en restauración, que señala que el 83 por ciento de los estadounidenses reconoce que intenta incorporar más alimentos vegetales a su dieta por motivos de salud.
iStock
La firma de investigación Global Data, por su parte, constata que el vegetarianismo ha aumentado 600% en Estados Unidos desde el año 2014. El 6 por ciento de la población se identifica como vegana (esto es, que no consume ningún producto de origen animal).
iStock
Flores comestibles. Los geranios, pensamientos o caléndulas no son solo decorativas. Su color y aroma es cada vez más apreciado en la cocina occidental, según Consumer Reports. Aquí tienes una lista de flores comestibles.
LUMIKK555/Getty Images/iStockphoto
Algas, verduras del mar. Las algas son una alternativa muy interesante como fuente de proteínas. Además, generan pocos residuos y hay espacio submarino suficiente en el planeta para cultivarlas en grandes cantidades. Se encuentran en el supermercado en forma de ensalada (alga wakame), sushi (alga nori) o deshidratadas (alga kombu).
iStock
Hongos hasta en la sopa. Los hongos son un clásico en casi todas las cocinas del mundo, pero la tendencia a utilizarlos para elaborar cafés, jugos, tés e incluso productos de belleza como los de la fotografía es reciente. La cadena de supermercados saludables Whole Foods los ha elegido como una de las 10 tendencias del año. Hablamos de variedades como reishi, chaga o cordyceps, entre otras.

Súper polvos. Los expertos de Whole Foods aseguran que "súper polvos" como extracto de té matcha, cúrcuma, maca o espirulina están pisando fuerte porque son muy fáciles de añadir a batidos, sopas o barritas para un extra de energía o como alternativa al café, por ejemplo.
Getty Images
Alimentos "funcionales". Nos referimos a productos que, además de aportar nutrientes esenciales, conceden beneficios extra para cuidar de la salud y ayudar a prevenir enfermedades. Los más conocidos son los probióticos y prebióticos. Los primeros son seres vivos (bacterias y levaduras), que permanecen activos en el intestino. Están presentes en yogures frescos, leches fermentadas o el kéfir, por ejemplo.
iStock