La muerte de más de 50 migrantes que eran transportados dentro de un tráiler en el sur de Texas ha vuelto a poner los reflectores sobre uno de los métodos más peligrosos que usan los coyotes. Antes de que ocurriera la tragedia, la Patrulla Fronteriza reportó un aumento de estos casos y notó que ahora rocían cal, aromatizante y sazonador de carne sobre los indocumentados para ocultar su olor.