Diario de la caravana: El temor a un nuevo cierre fronterizo reduce las visitas a Tijuana

Empresas turísticas y consultorios médicos en la ciudad fronteriza de Tijuana están reportando una reducción en sus ingresos desde que llegó una caravana de migrantes centroamericanos.

Aproximadamente 6,000 migrantes estaban alojados en un refugio cuya capacidad fue superada y que las autoridades cerraron el fin de semana, trasladando a la gente a una sala de conciertos ubicada más lejos de la frontera.

La presencia de los migrantes ha alejado a los turistas y visitantes que van a Tijuana, ante el temor de quedarse atrapados en México por un nuevo cierre en el cruce, reportó el domingo el diario San Diego Union-Tribune.

El cruce fronterizo es utilizado por los residentes de Tijuana utilizan para llegar a sus empleos o hacer compras en el lado estadounidense, y los turistas de Estados Unidos que van al sur.

El Hotel Rosarito Beach, que recibe a muchos turistas estadounidenses, ha tenido una disminución del 60% en las reservaciones que recibe, según su propietario Hugo Torres. En tanto, miembros de la asociación médica de Tijuana ofrecían descuentos y paquetes de beneficios para los locales y pacientes de Estados Unidos en un intento por contrarrestar sus pérdidas.

Georgina Carabarin, prostodoncista de Tijuana, dijo que alrededor del 70% de sus pacientes son de San Diego, por lo que ella espera que todo vuelva pronto a la normalidad.

Una mujer que asegura haber participado en el tráfico y ocultamiento en el sur de Texas afirma que la llegada de los migrantes de la caravana es aprovechada para los coyotes, quienes aumentan los precios por los acuerdos que incluyen alimentación y alojamiento por tiempo indefinido.

Ante esta situación, las autoridades fronterizas aseguran que en estas prácticas ilegales hay menores de edad involucrados.

Inundado el centro deportivo Benito Juárez por la copiosa lluvia que cayó este jueves sobre Tijuana, cientos de miembros de la caravana de migrantes centroamericanos comenzaron a ser trasladados por las autoridades a un nuevo refugio de emergencia en el este de la ciudad.

Una fila de autobuses del transporte público los llevó a partir de las 6:12 de la tarde a la explanada 'El Barretal', que habilitaron el Instituto Nacional de Migración (INM) y otras entidades de gobierno mexicano para albergar, al menos, a la mayor parte de los 6,150 miembros de la caravana migrante.

La mudanza es voluntaria, aunque el Benito Juárez se encuentra aún en peores condiciones. “No podemos quedarnos aquí. Está perro (difícil), por eso me voy”, dijo José Melara, un salvadoreño de 25 años que se subió a un bus cargando una mochila, una cobija húmeda y una casa de campaña.

Sentada sobre una bolsa negra de plástico, frente a los buses en fila, la hondureña Angélica Morales daba sus razones para quedarse.

“Porque no es seguro nada, no sé hasta dónde está y según me cuentan está lejos de aquí. Quieren hacer más débil la caravana. Uno lo siente”, dijo esta mujer que viene con sus dos hijos, de 16 y 17 años.

Usando el megáfono de una patrulla, un funcionario del INM le advertía a los indecisos: “El mal tiempo va a continuar, va a seguir lloviendo. Los invitamos a irnos a un lugar techado y en mejores condiciones”, dijo. “Principalmente mujeres y niños”, agregó.

Un policía municipal continuaba su labor de convencimiento: “No se les obliga a nadie. Si quieren seguirse mojando, síganse mojando”.

El principal temor de los que no se animan a cambiar de refugio es que los alejen de la frontera y los acerquen a su retorno a Centroamérica.

“Mañana van a cerrar este lugar. No habrá comida, nada”, le insistía un empleado municipal a una madre.

Un pequeño grupo de mujeres, de aproximadamente 10, anunció que inician este mismo jueves, desde la 1 de la tarde hora local, una huelga de hambre.

Las mujeres quieren con este acto protestar ante las autoridades migratorias de Estados Unidos y exigir que aumente el número de casos de asilo que procesan diariamente: de 40 a 50.

Las organizadoras de esta propuesta esperan que al final sean 25 mujeres y 25 hombres los que estén en ayuno.

En la conferencia de prensa desde Tijuana, México, indicaron que “se va a formar una comisión que irá a hablar con las autoridades de inmigración”. En el acto, además, dieron las gracias por la ayuda recibida.

Las mujeres indicaron que no tienen miedo por su salud y recordaron que pedir asilo es un derecho.

Debido a la situación que hay en el puesto fronterizo de San Ysidro, los migrantes posiblemente tengan que esperar semana o incluso meses hasta poder iniciar el proceso de asilo.

Aquí te explicamos lo que se necesita para pedir asilo político en la frontera.

Esta madre hondureña recibió una donación de una pareja anónima que decidió dar el dinero luego de ver su historia en las redes del corresponsal de Univision Noticias Pedro Ultreras.

"A pesar del bello mensaje de esta mujer, me quedo con la sonrisa de este adolescente de 15 años que me robó el corazón desde que lo conocí hace más de un mes en el sur de México", escribió Ultreras en su cuenta de Instagram.

Aquí tienes el mensaje.

Los 42 inmigrantes que fueron detenidos al cruzar de manera irregular la frontera de Estados Unidos con México el pasado domingo no afrontarán cargos por estas acciones ante la Justicia estadounidense, informó a Efe un funcionario de la Administración.

"Los inmigrantes no afrontarán cargos", aseguró a la agencia esta fuente en referencia a esas 42 personas, un grupo en el que había algunas mujeres y menores de edad.

El funcionario no precisó cuál es la situación actual de estas personas ni qué proceso afrontarán ahora.

Los 42 inmigrantes fueron arrestados el domingo en territorio estadounidense tras ingresar por la frontera desde Tijuana (México).

El grupo, que formó parte de una manifestación realizada en suelo mexicano, atacó -según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) de EEUU- con piedras a agentes que vigilaban el muro que divide los dos países en la zona californiana de San Ysidro, una situación a la que respondieron con el uso de gas lacrimógeno.

Fueron algunos de los que antes habían logrado romper el cerco de la Policía Federal de México.

El portavoz del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés), Tyler Houlton, afirmó durante una rueda de prensa telefónica que el empleo de gas pimienta o lacrimógeno en labores migratorias "ha sucedido en el pasado" y que "si los agentes vuelven a ser apedreados, pasará de nuevo".

"Durante años, la CBP ha utilizado de forma regular gas lacrimógeno y espray pimienta como la mínima fuerza necesaria para proteger nuestra frontera sur y (protegerse) a sí misma de agresores violentos", enfatizó Houlton.

En este artículo te explicamos por qué se usaron los gases lacrimógenos:

La agencia federal de inmigración mexicana está evaluando un gran centro de eventos en el lado este de Tijuana que podría servir como segundo refugio de emergencia para miles de migrantes centroamericanos que viajaron a esta comunidad fronteriza como parte de una caravana para buscar asilo en los Estados Unidos.

La gran mayoría de los migrantes se alojan en el complejo deportivo Benito Juárez, propiedad de la ciudad, un área de recreación al aire libre que casi duplica su capacidad prevista solo dos semanas después de su apertura.

Las condiciones en el actual refugio, donde hay cerca de 6,100 migrantes, han empeorado con el tiempo. La zona se ha convertido esencialmente en una ciudad de tiendas de campaña, con escasez de alimentos, saneamiento y espacio. Muchos migrantes han estado durmiendo en las calles y aceras fuera del complejo cerrado durante los últimos días.

Los funcionarios mexicanos están trabajando a contrarreloj para abrir un espacio interior más adecuado para albergar a los migrantes durante varias semanas.

"Estamos preocupados por las condiciones de salud y seguridad de las familias que se encuentran en el complejo deportivo, por eso nos estamos preparando", dijo Mario Osuna Jiménez, director de desarrollo social de la ciudad citado en El Sol de Tijuana.

El miércoles por la tarde, docenas de trabajadores barrieron, fregaron y limpiaron mientras esperaban la aprobación del Instituto Nacional de Migración de México para seguir adelante con los planes de convertir el espacio en un refugio temporal.

El centro de eventos tiene una superficie de 161,000 pies cuadrados. Cuenta con cinco áreas techadas, apuntó Osuna Jiménez. Eso les permitiría alojar a las familias por separado y satisfacer otras necesidades de salud y seguridad.

"Estamos listos para trabajar toda la noche para poder abrirlo, y para que esté listo para salir el jueves por la mañana", agregó.

Una familia mexicana de 20 integrantes que asegura que su caso de asilo es algo de vida o muerte está en la frontera esperando su turno para poder solicitar asilo en EEUU.

Ellos desde hace semanas que están allí, desde antes de la llegada de la caravana. Esta familia forma parte de los cerca de 2,000 migrantes que ya estaban allí aguardando para pedir refugio en EEUU.

Y mientras que algunos migrantes centroamericanos están optando por volverse a sus países, otros están pensando en pasar la frontera como sea.

Mientras estos miles de migrantes se siguen acumulando frente a la valla fronteriza y viven en carpas mientras transitan la espera que puede ser de varios meses, el gobierno de Donald Trump busca poner un freno a esta ola. Para ello, ordenaron que no se permita pedir asilo al que ingresa a EEUU sin papeles.Y mientras que un juez frenó tal orden, ahora el gobierno está disputando la decisión de la justicia.

Se calcula que cerca de 6,000 migrantes están durmiendo en carpas frente a la frontera de EEUU. El periodista de Univision Jorge Ramos habló de la "crisis internacional y humanitaria" que se está viviendo en Tijuana.

El reportero de Univision Noticias Isaías Alvarado habló con el director de Atención al Migrante del ayuntamiento de Tijuana, César Palencia Chávez, en ese mismo terreno sembrado de carpas en donde viven los migrantes.

"Imagínate tener a más de 6,000 personas en un solo lugar. Es imposible. Se hace lo humanamente posible", dijo Palencia Chávez. La situación se ha vuelto tan crítica, que los trabajadores del municipio han aceptado 'donar' jornadas laborales para que la situación no se salga de control en este enorme refugio, dijo el funcionario.

"Ninguna ciudad del mundo está preparada para esto", aseguró Palencia Chávez. El ayuntamiento calcula que cada día debe desembolsar unos 25,000 dólares para mantener en pie este sitio que está a punto de colapsar. "No se podría sostener esto quizás durante tres o seis meses más. Es muy incierto", advierte.

Son muchos los motivos que tienen los migrantes que deciden volverse a sus países a pesar de haber viajado semanas con la caravana y haber llegado finalmente a la frontera con EEUU.

"Me voy derrotado porque no hay nada de ayuda. Hay que esperar seis meses para que te den asilo. Tienes que aguantar hambre y frío aquí", dice el hondureño de 30 años Melvin Villanueva, antes de abordar un vehículo del Instituto Nacional de Inmigración (INM), la agencia mexicana equivalente al Servicio estadounidense de Inmigración y Aduanas (ICE).

Villanueva viajó 42 días en su camino hacia Estados Unidos, padeciendo hambre y frío en albergues de la frontera. Para él, el 'sueño americano' se acabó. Las malas condiciones que tiene que soportar sumado a la llegada de la época de Navidad, hicieron que Villanueva decida volver a Honduras.

Cuando salió de su país no pensaba que la pasaría tan mal en México, ni que EEUU le cerraría la puerta colocando alambres de púas y militares. "Yo quería trabajar y salir adelante", cuenta. "No se pudo, pero cuando salga otra oportunidad volvemos".

No hay cifras precisas sobre la cantidad de personas que han decidido retornarse. Este lunes, las autoridades reportaron el regreso de 105 centroamericanos, transportados en un avión de la Policía Federal hasta el aeropuerto de la Ciudad de México, para desde ahí continuar su viaje en autobuses. Pero el flujo también continúa en dirección a EEUU.

Aquí, la historia completa:

El Gobierno mexicano informó este miércoles que 686 centroamericanos que se encuentran en el norteño estado de Baja California, fronterizo con Estados Unidos, y en Ciudad de México se registraron de manera formal ante el Instituto Nacional de Migración (INM) para solicitar empleo en México, informó la agencia EFE.

El pasado 15 de noviembre las Secretarías de Trabajo y de Gobernación presentaron un plan conjunto con empresas del Consejo Nacional de la Industria Maquiladora y Manufacturera de Exportación que tiene como finalidad "proporcionar estabilidad personal y familiar" a los migrantes.

Los empleos que se ofertan están relacionados con el sector manufacturero y el sector servicios, y van desde "especialización en técnicas industriales hasta prestación de servicios", todo ello en concordancia con la experiencia o capacidades de los solicitantes.

"El INM ha implementado diversas acciones de acercamiento a todos los extranjeros que ingresaron en caravanas a territorio nacional, con el propósito de regularizar su estancia", según el comunicado.

Se estima que en Tijuana hay unos 6,000 migrantes centroamericanos que entraron a México desde el 19 de octubre pasado en varias caravanas, en el estado de Baja California hay unos 7.000 y en todo el país unos 9.000.

Según un informe del Centro Wilson unas 465,000 personas ingresan a EEUU cada día a través de los puertos de entrada en la frontera sur y solo en 2017 el flujo de bienes entre ambos países fue de 558,000 millones de dólares. Si el presidente Donald Trump cumpliera su repetida amenaza, el caos económico se establecería entre Estados Unidos y México.

Aquí te lo explicamos:

El gobierno de Donald Trump acusa al juez que tomó la decisión diciendo que esto afecta los esfuerzos para que los migrantes de la caravana sigan las leyes. Aquí tienes la información.

Aproximadamente 50 miembros de la comunidad LGBTQ e integrantes del éxodo masivo llegaron a esta zona fronteriza y se espera que el fin de semana lleguen más migrantes con el objetivo de solicitar asilo.

En Arizona las medidas de seguridad se han incrementado, tanques con soldados recorren la franja limítrofe y uniformados aceleran el paso para terminar de instalar alambres de púas en el muro.

Se unieron al grupo del éxodo masivo instalado en el Centro Deportivo Benito Juárez, el cual ya está en su máxima capacidad.

La cifra de centroamericanos en este albergue supera las 6,000 personas y se espera la llegada de más migrantes que se quedaron atrás en pequeños grupos.