"Las latinas están progresando, y en algunos casos, de manera extraordinaria", es lo que plantea un informe de la Casa Blanca y su Iniciativa en Excelencia Educativa para Hispanos, que fue presentado este viernes en una cumbre sobre la influencia de las latinas en Estados Unidos.
"Las latinas están haciendo progresos extraordinarios en EEUU": cumbre de hispanas en la Casa Blanca
Los espacios que han ganado las mujeres en Estados Unidos son cada vez más notorios y este evento sirvió de escenario para destacarlos. La periodista de Primer Impacto Pamela Silva Conde fue una de las oradoras invitadas.

Dentro de los datos que destaca, este reporte asegura que en la década entre 2003 y 2013 creció un 15% el índice de graduación de secundaria de las latinas (entendidas en el reporte como hispanas también). También sobresale el porcentaje de aquellas que continuaron la educación universitaria y el crecimiento en la representación (entre 30 y 40%) en profesiones como educación, derecho, medicina y administración. Los negocios que pertenecen a latinas también están creciendo con mayor velocidad que los negocios de mujeres en general.
Para mostrar estos avances al evento asistieron como oradoras mujeres hispanas que han sobresalido en diferentes campos profesionales, que van desde empresarias, escritoras, científicas, actrices hasta periodistas, líderes comunitarias y destacadas funcionarias del gobierno, como es el caso de la exsecretaria del Tesoro Rosie Ríos.
Una de las invitadas fue la periodista de Primer Impacto Pamela Silva Conde, quien fue moderadora del panel 'Mujeres innovadoras y pioneras'. "La realidad es que muchas latinas tienen la habilidad de convertir la adversidad en oportunidad, algo que confirmamos hoy", esas fueron las palabras con las que Silva Conde presentó las historias inspiradoras de emprendedoras que persiguieron sus sueños y ahora son modelos a a seguir.
De hecho el informe asegura que a pesar de las innumerables barreras, las latinas "han hecho significativos progresos en la última década". Se resalta que aunque aún no les va tan bien como debería irles de acuerdo a sus esfuerzos, las hispanas sí son conscientes de sus aspiraciones y de que sus contribuciones son de gran imporancia para la sociedad y la economía del país.
Además de compartir experiencias e historias de motivación, en la cumbre del poder de las latinas en EEUU se hizo énfasis en el tema de la educación, para aplaudir estas cifras de las que habla el reporte, pero también generar la necesidad de mejorar esos números en la comunidad hispana.
"Solo el 4% de las mujeres latinas tiene una maestría o diploma de educación superior. Tenenemos que incrementar este número", recordó en uno de sus tuits desde la cumbre Silva Conde.
La periodista habló durante su intervención sobre cómo redefinir lo que es ser latina y cambiar la idea de lo que el resto del país piensa, "de cómo pensamos y cómo nos consideramos como comunidad y como mujeres". Para Silva Conde uno de los mensajes que desde su profesión puede dar es el hecho de "poder ser dueñas de nuestra propia historia, historias de inmigración y sacrificio, de haber logrado el éxito tras sentirnos cómodas en nuestra propia piel".
El informe recuerda que según proyecciones de 2060, las latinas serán cerca de un tercio de la población femenina en Estados Unidos. "El futuro de Estados Unidos depende en gran parte del futuro de las latinas. El futuro se está construyendo hoy con las jóvenes que representarán una gran porción de la economía estadounidense", señala el documento.
Sin embargo, el estudio también reconoce que muchas de las barreras que detienen a las latinas están relacionadas con pobreza: "un cuarto de latinas viven bajo la línea de la pobreza y más de la mitad viven casi en la pobreza". Este factor explica los desafíos en materia de educación, pues debido a los problemas económicos las jóvenes no logran muchas veces terminar la secundaria, mucho menos pagar deudas estudiantiles y los niveles bajos de educación disminuyen sus posibilidades de empleo en el mercado, donde las latinas ganan solo 55 centavos por cada dólar que reciben los hombres blancos.
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