Por Alejandra Lagos
Más de 40 estados en el país adoptaron los estándares del Common Core, y ahora, por primera vez, los estudiantes están tomando los exámenes alineados a estas normas.
Los estándares académicos del Common Core establecen las habilidades que los estudiantes de kínder a doceavo grado deben dominar en matemáticas y artes de lenguaje (literatura y escritura), para poder llegar preparados a la universidad.
La época de exámenes pueden causar mucho estrés para los estudiantes, algo que puede afectar los resultados negativamente.
Acá te traemos cinco simples consejos sobre cómo puedes ayudar a tus hijos estar más relajados el día del examen, y llegar listos para hacer un trabajo fantástico.
1. Dormirse temprano. El día antes de un examen es muy importante irse a dormir temprano para permitir que el cuerpo descanse el tiempo necesario para poder funcionar adecuadamente al día siguiente. Para poder dormir bien es importante comer una cena ligera, rica en Omega 3, como pescado.
2. Despertarse temprano: Hay un dicho que dice “el que madruga, Dios lo ayuda” Despertarse temprano el día del examen ayudará al estudiante a sentirse más relajado ya que tendrá suficiente tiempo para asegurarse de llegar a tiempo, repasar información, y preparar todo lo necesario.
3. Comer un desayuno saludable y rico en proteína: Tratar de no comer comidas pesadas ricas en grasa saturada, o azúcar, ya que eso puede tener un efecto negativo en la concentración. Comer comidas adecuadas como huevo, cereal y fruta dará al cuerpo la energía necesaria para funcionar correctamente.
4. Asegurarse de tener todos los materiales que se necesitaran para el examen. Como lápices, o, si es un examen de matemáticas y es permitido, llevar la calculadora. Uno no quiere llegar al examen y descubrir que olvidó algo, ya que eso causará nervios y estrés, lo que puede perjudicar el resultado. Es importante estar relajado durante los exámenes.
5. No dejar ninguna pregunta sin responder. Es importante contestar todas las preguntas, aunque no se esté seguro de la respuesta. Al menos al contestar habrá chance de que la respuesta esté correcta, si se deja sin contestar, seguramente estará mal.