Muy pocas personas están preparadas para recibir malas noticias. El doctor Matthew Trunsky lo sabe bien porque durante los últimos 18 meses ha visto morir a más de 100 pacientes de covid-19. Sin embargo, dice estar impresionado de que la gente, aún en su lecho de muerte, sea escéptica de la enfermedad y de las vacunas.
Cansado de respuestas como "prefiero morir antes que vacunarme", médico se desahoga en Facebook
En un solo turno de 12 horas, el neumólogo Matthew Trunsky, del Hospital Beaumont de Michigan, recibió comentarios de pacientes graves como “Prefiero morir antes que vacunarme”, “Le exijo que me suministre ivermectina o va a escuchar de mi abogado” o “Quiero a otro doctor. No le creo a usted”.

En su larguísimo turno de 12 horas del pasado 11 de septiembre, el neumólogo y director de la unidad de cuidados paliativos del Hospital Beaumont, ubicado en la ciudad de Troy, en el sureste de Michigan, recibió múltiples respuesta negativas de la gravedad y la existencia del virus de parte de pacientes y varios familiares de internados.

Aquel día, Trunsky no pudo más. Física y emocionalmente cansado, llegó a casa y se desahogó en su cuenta de Facebook, donde enlistó los comentarios y respuestas de pacientes y familiares que han pasado por las camas de su unidad.
"En los últimos dos días laborales he escuchado lo siguiente: 'Usted está mal doctor. Estoy muy sano. No tengo covid. Estoy bien'". Trunsky acotó que en realidad el paciente estaba luchando por su vida en una cama del hospital.
"'Le exijo que me suministre Ivermectina o va a saber de mi abogado". La exigencia fue de un paciente que pedía el medicamento que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA en inglés) ha dicho que no se debe de utilizar para tratar el covid-19.
Otro paciente dijo al médico que se iba. "'No me importa lo que diga. Me largo de aquí'", escuchó. Trunsky le respondió que estaba en su derecho, pero que "estaría muerto antes de que pudiera llegar a su automóvil".
"'Prefiero morir antes que vacunarme'", también escuchó decir esa misma jornada. El especialista respondió al paciente que su deseo podría hacerse realidad.
En declaraciones a la filial de Michigan de la radio pública NPR, Trunsky dijo que los pacientes están llegando críticamente enfermos y están muriendo todos los días. "Y ahora lo que es particularmente desafiante es que la gente está muriendo de una enfermedad que en gran medida se puede prevenir", aseguró.
Otro comentario que compartió en la misma publicación fue que un paciente no se vacunó porque su hijo le dijo que no lo hiciera. "El paciente actualmente está luchando por su vida".
"'Quiero a otro doctor. No le creo a usted'", escribió sobre otro paciente. Una mujer, cuyo esposo murió de covid-19, le dijo que nunca se sentiría cómoda recomendando la vacuna a familiares y amigos.
El médico dijo que el enojo de la gente es hacia los médicos de los servicios de salud “que realmente estamos haciendo nuestro mejor esfuerzo y que brindan una atención excepcionalmente excelente”.
Dijo entender la reacción de las personas que pudieron haber sido vacunadas, pero que ahora paradójicamente y sin sentido "están enojados con la comunidad médica".
Finalmente, Trunsky aseguró que los números de contagio siguen en aumento. Y recomendó a la población lo obvio... que se vacunen.
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