Es desagradable pensar en ello, pero más vale prevenir que lamentar.
Ratas, ratones y hasta ardillas pueden alojarse en tu carro. Estos roedores adoptan a los coches como su hogar y dañan algunas de sus piezas de manera irreparable. Sucede con mayor frecuencia en épocas de frío y cuando vives en zonas boscosas.
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Los roedores
se alojan principalmente dentro del cofre, pero la espuma de los asientos y alfombras son también atractivos para estos animales. La presencia de materiales reciclables y de origen natural como aceites vegetales y azúcares en ciertos componentes de tu coche, también pueden ser un imán para ellos.
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Cuando se alojan en el interior del cofre, los roedores
muerden el cableado causando estragos en el sistema eléctrico, lo que obligará a una visita al taller para reparaciones que pueden llegar a ser muy costosas. Si el carro permanece muchos días estacionado, se alojarán, defecarán y orinarán en él, dejando olores insoportables especialmente cuando mueren en el interior. Todo esto aparte de los obvios problemas higiénicos que esta circunstancia implica.
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En ocasiones
es fácil detectar su presencia, ya que habrá residuos de alimento en el motor.
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Prevenirlo es muy fácil. Lo primero que debes evitar es
estacionarte cerca de contenedores de basura.
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Si vives en una zona boscosa o acostumbras visitar alguna, siempre
realiza una revisión exhaustiva en tu coche antes de emprender la marcha. De igual forma, si estás de visita en el campo, no dejes tu auto cerca del granero. Es muy probable que haya roedores alrededor.
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Siempre mantén limpio el lugar donde lo estacionas. Si es en un lugar cerrado, como la cochera,
procura no guardar ahí mismo alimento para mascotas, lo cual es muy común. En caso de no tener otro lugar, entonces deposítalos en recipientes resistentes y sellados a prueba de roedores.
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Si acostumbras comer en tu auto,
procura no dejar comida o residuos de alimento en tu carro. Los roedores buscan alimento y harán todo lo posible por conseguirlo, incluyendo invadir tu vehículo.
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Revisa siempre el lugar donde estaciones tu auto. En caso de que tengas garaje, periódicamente revisa que
no haya un agujero por donde puedan ingresar los roedores.
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Cuando tengas la sospecha de que hay un roedor en tu garaje, lo más común es
colocar trampas cerca y debajo del auto. Si utilizas algún veneno para ratas hazlo siempre con precaución y lejos del alcance de niños.
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A los roedores no les gusta los aromas fuertes. Cuando detectes que hacen de las suyas al interior del cofre,
puedes colocar aceite de menta alrededor de los cables, para disuadir a los roedores con su olor. Tienes que hacerlo con frecuencia, para que el olor se mantenga y los ahuyente.
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Otra forma fácil de ahuyentarlos es
tener un gato como mascota.
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El olor del amoniaco, presente en algunos productos de limpieza, es muy fuerte para estos animales. Puedes comprar la sustancia sola y colocar un recipiente debajo de tu auto para evitar que se acerquen a él.
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Existen en el mercado
dispositivos electrónicos que puedes colocar en tu garaje y ahuyentará a los roedores, no hay necesidad de eliminarlos ni de usar productos químicos. Gracias a la emisión de una frecuencia de ultrasonidos que afectan el sistema periférico sensorial del animal, lograrás alejarlo de tu auto.