📷 Mercados vacíos y comedores de beneficiencia llenos: un recorrido por la Venezuela de la escasez

Ventas informales de alimentos en la calle que suben de precio cada semana, mercados donde cada día cierran más puestos por la escasez de productos y la falta de capacidad de compra de los venezolanos y comedores de beneficiencia para niños cada vez más llenos. Este es el panorama en las calles de Caracas ante la rampante crisis económica del país.

Por:

Alfredo Lasry

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Una venta informal de huevos instalada en la acera de una calle del este de Caracas. Según Marta Izaguirre, la vendedora, los empaques de 30 huevos que hoy cuestan 12,600 bolívares costaban 10,000 hace dos semanas.

Alfredo Lasry

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Un grupo de niños juega en una escalinata de La Vega, un barrio pobre de la capital de Venezuela, donde la mayoría de las personas vive en construcciones improvisadas. Allí fue instalado un comedor de Sustento, una iniciativa privada para dar comida a 7,500 niños en ocho estados del país.

Alfredo Lasry

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Decenas de niños hacen fila cada día para entrar al comedor de Sustento en La Vega. Allí reciben un plato de arroz, carne molida, ensalada y una ración de lactovisoy, una bebida con carbohidratos y proteínas para combatir la desnutrición.

Alfredo Lasry

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En el comedor de La Vega se sirven cien almuerzos diarios. Las madres de los niños se encargan de cocinar y administran la comida.

Alfredo Lasry

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Yuleidys Flores, de 27 años, lleva a su hija Fabiannys a alimentarse en el comedor de Sustento en La Vega. “Ya mis otros hijos almorzaron aquí, en la casa les doy una sopita de verduras, algunos granos; mi esposo trabaja en mantenimiento, pero le pagan sueldo mínimo y además recibimos el bono, pero no nos alcanza para nada”.

Alfredo Lasry

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Las neveras vacías del mercado Quinta Crespo, uno de los más antiguos y céntricos de Caracas, muestran el impacto de la escasez de productos básicos.

Alfredo Lasry

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Muchos de los puestos de ropa de ese mercado permanecen cerrados y los de comida sin productos. “La gente apenas puede comer, ¿cómo van a comprar ropa?”, comenta un vendedor de fruta.

Alfredo Lasry