Un incendio puede provocarse y expandirse en cuestión de segundos como una amenaza para tu integridad y la de tu familia, por lo que es importante saber qué hacer en estos casos.
¿Sabes qué hacer ante un incendio? Te decimos cómo actuar durante y después
Si te encuentras en un incendio, debes saber qué hacer para evitar daños y tragedias, así cómo lo que debes hacer después de él, especialmente si ocurre en tu casa o propiedad.

En menos de 30 segundos, una llama puede convertirse en un gran incendio, con temperaturas de hasta 600ºF a la altura de tus ojos, 100ºF en el piso y humo espeso que causa oscuridad total e inhalación de material tóxico.
Por eso, si bien es importante entender que ninguna medida de precaución sobra, también es importante saber qué hacer si ocurre un incendio donde te encuentras.
El portal ready.gov del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) nos brinda estas recomendaciones para actuar durante y después de un incendio para evitar que este incidente se convierta en una verdadera tragedia.
¿Qué hacer durante un incendio?
Déjate caer al piso y gatee por debajo de todo humo hasta llegar a la salida. El humo espeso y gases tóxicos se acumulan primero a lo largo del techo.
Antes de abrir una puerta, toca la cerradura y la puerta. Si uno de éstos está caliente, o si el humo sale por los bordes de la puerta, déjala cerrada y usa tu segunda vía de escape.
Si abres una puerta, ábrela despacio. Debes estar listo para cerrarla rápidamente si hay humo espeso o fuego.
Si no puedes llegar a alguien que necesita ayuda, abandona el hogar y llame al 911 o al Departamento de Bomberos de tu localidad. Infórmela al operador de emergencia dónde se encuentra la persona.
Si tus mascotas quedan atrapadas en su hogar, infórmalo a los bomberos de inmediato.
Si no puedes escapar, cierra la puerta y cubre las rejillas de ventilación y las grietas alrededor de las puertas con tela o cinta para mantener el humo fuera. Llama al 911 o a tu Departamento de Bomberos inmediatamente. Quédate donde estás y haz señales para pedir ayuda desde la ventana con un trapo de color liviano o una linterna.
Si tu ropa se prende en fuego, debes parar, echarte al piso y rodar: detente inmediatamente, déjate caer al suelo y cúbrete la cara con las manos. Da vueltas en el suelo o rueda de un lado a otro hasta que se apague el fuego. Si tú o alguien más no puede parar, echarse al piso y rodar, puedes sofocar las llamas con una manta o toalla.
Usa agua fría para tratar quemaduras de inmediato por tres a cinco minutos. Cúbrelas con un trapo limpio y seco. Obtén atención médica inmediatamente llamando al 911 o al Departamento de Bomberos.
Después de un incendio
Comunícate con un servicio de ayuda ante un desastre local, como la Cruz Roja, si necesitas vivienda provisional, comida y medicamentos.
Consulta con el Departamento de Bomberos para asegurarte de que sea seguro entrar a tu residencia.
No intentes reconectar los servicios públicos por tu cuenta. El Departamento de Bomberos debe verificar que es seguro usar los servicios públicos o que estén desconectados antes de irse del sitio.
Haz un inventario de tu propiedad y artículos dañados. No deseches ningún artículo dañado hasta después de hacer el inventario de tus artículos.
Empiece a guardar los recibos de todo el dinero que gastes por las pérdidas por el incendio. La compañía de seguros podría pedir los recibos en el futuro, o podrías necesitarlos para verificar las pérdidas reclamadas en tu declaración de impuestos.
Notifica a tu empresa hipotecaria sobre el incendio.
