SAN FRANCISCO, California. – Las empresas líderes del servicio de viajes compartidos, Uber y Lyft, así como la compañía de entrega de alimentos a domicilio, DoorDash, amenazaron este jueves con gastar $90,000,000 como parte de un esfuerzo por mantener a sus conductores bajo el estatus de contratistas independientes.
Uber, Lyft y DoorDash amenazan con gastar $90 millones para evitar clasificar a conductores como empleados
Los titanes de Silicon Valley amagaron con llevar su propia iniciativa de ley a la boleta electoral de 2020 si los sindicatos y asambleístas de California no alcanzan un acuerdo que defina reglas específicas para sus conductores, siempre y cuando se mantengan bajo el estatus de contratistas independientes.
El ultimátum de estos tres titanes de Silicon Valley podría representar la primera vez que los gigantes de la tecnología en California se enfrascan en una batalla electoral contra los sindicatos y los legisladores estatales para intentar salirse con la suya.
La inyección millonaria de recursos se destinaría a campañas para colocar su propia iniciativa de ley en la boleta electoral de 2020. La amenaza llega a dos semanas de que finalicen las sesiones de la Legislatura estatal y mientras la Asamblea debate la medida AB 5, un proyecto que pondría mayores trabas para que las empresas puedan clasificar a sus trabajadores como contratistas independientes y no como empleados, situación que les otorgaría protecciones salariales y otros beneficios.
Billionaires who say they can’t pay minimum wages to their workers say they will spend tens of millions to avoid labor laws. Just pay your damn workers! https://t.co/PtyP4JZ7W0
— Lorena (@LorenaSGonzalez) August 29, 2019
“Los multimillonarios que dicen no poder pagar salarios mínimos para sus trabajadores dicen que gastarán decenas de millones de dólares para evitar las leyes laborales. ¡Páguenles a sus trabajadores!”, escribió en Twitter la asambleísta Lorena González, autora de la propuesta AB 5. La Federación de Trabajadores de California, que representa más de 2 millones de empleados en el estado, dijo que se verá las caras con estas compañías en la próxima boleta electoral.
“En lugar de mejorar las condiciones de sus trabajadores y pagarles un salario digno a sus conductores, Uber y Lyft anunciaron que gastarán millones de dólares en una campaña para arrebatarle a esos mismos conductores las protecciones laborales básicas. Le haremos frente a este gasto político absurdo con una campaña liderada por trabajadores que derrote a su propuesta y le asegure a la clase trabajadora que tienen el derecho a sindicalizarse como lo marca la ley”, señaló el consorcio de sindicatos a través de un comunicado.
Este viernes el proyecto de ley AB 5 fue aprobado en el Comité de Apropiaciones del Senado estatal; previamente había avanzado en la Asamblea con un voto mayoritario de 53-11. En caso de convertirse en ley sería una de las legislaciones más estrictas sobre clasificaciones de trabajadores en Estados Unidos y potencialmente sentar un precedente para otros estados que busquen los mismos beneficios para las personas que trabajan en el sector de la economía compartida.
We cannot accept a situation in which a tiny handful of Americans become extraordinarily wealthy by paying their workers starvation wages.
— Bernie Sanders (@BernieSanders) August 30, 2019
It's time to pass AB 5, help drivers unionize, and stop Uber and Lyft from misclassifying employees as contractors. https://t.co/bku1557W0q
Ante el impacto de la iniciativa, el senador y precandidato a la presidencia de EEUU, Bernie Sanders, dijo vía Twitter que “no podemos aceptar una situación en la que un puñado de estadounidenses se vuelven extraordinariamente ricos pagándoles a sus trabajadores salarios de miseria. Llegó la hora de aprobar la AB 5, ayudar a los conductores a formar un sindicato y prohibirle a Uber y Lyft clasificar a sus trabajadores como contratistas”.
Impacto a su modelo de negocio
Uber, Lyft y DoorDash coinciden en que reclasificar como empleados a quienes pasan horas y horas ganándose la vida al volante representaría un cambio demasiado drástico a su modelo de negocio, el cual está basado en la flexibilidad de los conductores.
“Estamos enfocados en alcanzar un acuerdo, pero también estamos seguros en llevar este asunto ante los votantes en caso de ser necesario”, explicó Adrian Durbin, director de comunicaciones de Lyft, en un comunicado enviado a Noticias Univision 14.
Uber y Lyft han expresado públicamente su intensión de crear un marco laboral que incluye un sueldo mínimo base para los conductores de $21 por hora, además de aportar dinero a un fondo para financiar ciertos beneficios para sus trabajadores y abrir la posibilidad de renegociar salarios en cada ciudad. En DoorDash, por su parte, confirmó que apoya la idea del salario mínimo estandarizado al igual que seguro de accidentes laborales.
$21 isn’t a living wage for any category of worker in the San Francisco metro area except a single adult or two adults living together.
— Gig Workers Rising (@GigWorkersRise) August 28, 2019
What they’re offering is the floor, while hoping to kneecap any efforts to raise wages down the line & create a real union.
It’s not enough. https://t.co/FrFLjgweuY
Pero si sindicatos y legisladores no entran en línea y envían al escritorio del gobernador Gavin Newsom una nueva propuesta que defina reglas específicas para los conductores que trabajan como contratistas independientes, los tres gigantes de Silicon Valley están listos para gastar $30,000,000 cada uno y dejar que sean los electores de California quienes tomen la decisión. Sea cual sea la iniciativa, desde luego, estaría acompañada de una agresiva campaña para persuadir a los votantes.
Por más de un año, las compañías de viajes compartidos y otras empresas tecnológicas de Silicon Valley han cabildeado intensamente en el Capitolio estatal para aligerar los efectos de una decisión de la Corte Suprema de Justicia que allanó el camino para reclasificar a los trabajadores en todo el país, fallo que representa un riesgo para compañías como Uber y Lyft cuyo modelo de negocios depende en gran medida de un ejército de conductores dispuestos a trabajar como contratistas independientes.
Hasta el momento las tres compañías no han presentado un borrador de su propuesta. Mientras tanto, aunque el gobernador Gavin Newsom no se ha pronunciado de manera concreta sobre el proyecto de ley AB 5, su jefa de gabinete dijo en un comunicado que la gubernatura “está luchando de forma agresiva por el derecho de los trabajadores a organizarse y a ganar salarios más altos”.





















