Cuando un estudiante falta alrededor de 18 días al año se le cataloga como ausentismo crónico y, según las autoridades de educación, en San Francisco se reportó un 29% de faltas, de las cuales, el 47% hace parte la comunidad latina. De acuerdo con Laura Melgarejo, vocera del distrito escolar, los menores que faltan seguido a clase pueden tener consecuencias a futuro, pues “no están aprendiendo y pueden salir de sus escuelas y no terminar sus estudios”, dijo.