El segundo corredor más transitado de San Francisco está a solo días de ser reestructurado para instalar carriles exclusivos para el transporte público, con una inversión de casi cuatro millones de dólares.
El segundo corredor más transitado de San Francisco está a solo días de ser reestructurado para instalar carriles exclusivos para el transporte público, con una inversión de casi cuatro millones de dólares.