Un reporte semanal emitido por la Custom Border Patrol en el sector de Del Río, reveló la detención de más de 459 personas bajo los cargos de tráfico de personas o mejor conocidos como “polleros”, la mayoría de ellos ciudadanos norteamericanos que fueron sorprendidos transportando en sus vehículos a inmigrantes.
459 detenciones de traficantes de personas en una semana; la mayoría entre Uvalde y Dryden
La mayoría de los detenidos tienen sus residencias oficiales en ciudades en el centro y norte de Estados Unidos, lo que indica que sólo viajan a la frontera con el propósito de traficar personas.

Además, el informe informó de la detención de dos presuntos agresores sexuales arrestados en este mismo lapso que intentaban ingresar a territorio estadounidense.
Las cifras del tráfico de personas en Del Río
El informe indica que 60 por ciento de las detenciones se han dado sobre la carretera 90 o en sus acotaciones, entre Uvalde y Dryden, dentro del operativo “lone star”, en el cual colaboran elementos de las diferentes corporaciones de seguridad y miembros de Migración.
De manera general se han detenido y procesado a más de 8 mil inmigrantes, así como a 459 hombres y mujeres ciudadanos norteamericanos, que fueron sorprendidos mientras intentaban internarse en territorio estadounidense con personas de manera ilegal.
La mayoría de los detenidos tienen sus residencias oficiales en ciudades en el centro y norte de Estados Unidos, lo que indica que sólo viajan a la frontera con el propósito de traficar personas.
Los detenidos por tráfico de personas
De manera paralela se logro identificar a dos agresores sexuales entre los miles de migrantes que, procesados por semana, el primer caso corresponde a un hombre de 27 años de nacionalidad hondureña que había cumplido ya una condena por abuso sexual infantil en Estados Unidos, mientras que el segundo caso se trata de una persona registrada como ofensor sexual.
Las personas detenidas bajo los cargos de intento de tráfico de personas son registradas y procesadas por el departamentos de policía en el área de Del Río, sin embargo son trasladas a San Antonio, Texas donde se mantienen en prisión, hasta que se dicte su sentencia, que actualmente puede alcanzar una condena de 5 a 20 años de prisión.








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