ORLANDO, Florida.- Una ola de aire ártico descendió este inicio de semana desde las Llanuras del Norte hacia el sureste de Estados Unidos, dejando temperaturas históricamente bajas y afectando a más de 18 millones de personas bajo alerta. En Florida, el frío extremo provocó un fenómeno peculiar que el NWS ya ha convertido en tradición: la “advertencia por iguanas cayendo”.
Temperaturas récord y “lluvia” de iguanas: la ola polar sorprende a Florida
La ola ártica rompió récords históricos de frío y dejó a millones bajo alerta por heladas en el sureste. En Florida, las bajas temperaturas causaron la caída de iguanas al entrar en un estado de letargo por el frío.

Cuando los termómetros bajan de 40 °F (4 °C), estos reptiles de sangre fría entran en una especie de letargo que los paraliza y los hace caer de los árboles. El fenómeno marcó el primer gran frente frío de la temporada y sorprendió a una región que hasta hace pocos días disfrutaba de temperaturas de entre 70 y 80 °F (21 a 27 °C).
Aunque parecen muertos, en realidad se inmovilizan para conservar energía y suelen recuperarse cuando las temperaturas vuelven a subir. En redes sociales, los residentes compartieron imágenes de las iguanas aturdidas en aceras y jardines.
El brusco descenso térmico rompió varios récords diarios. En Jacksonville, el termómetro cayó el martes a 28 °F (-2 °C), superando el mínimo histórico de 35 °F (1.6 °C) registrado en 1977.
El Servicio Meteorológico Nacional prevé que el sureste estadounidense comience a estabilizarse gradualmente, pero el episodio deja claro que el invierno se adelantó este año. Para millones de residentes del sur, el contraste entre los días de calor reciente y las heladas repentinas fue una advertencia: la temporada fría ha llegado antes de lo esperado.
Norte y noreste de Estados Unidos experimentan intensas nevadas
El impacto del frente frío también se sintió en los estados del norte y noreste del país, donde la llegada del aire gélido se combinó con intensas nevadas. En comunidades cercanas a los lagos Erie y Ontario, en el estado de Nueva York, se emitió una advertencia meteorológica invernal por acumulaciones de entre 2 y 6 pulgadas (5 a 15 cm) de nieve.
Las ciudades de Niagara Falls, Rochester, Buffalo y Syracuse amanecieron el martes cubiertas de blanco, y las zonas montañosas del Tug Hill Plateau recibieron hasta 9 pulgadas (23 cm). Se espera que un nuevo sistema frontal incremente las acumulaciones a mitad de semana.
Las condiciones de las carreteras se volvieron peligrosas en varias zonas. En Virginia Occidental, una capa de nieve y hielo antes del amanecer provocó decenas de accidentes, mientras que en Vermont la nieve alcanzó las 8 pulgadas (20 cm), causando el cierre parcial de la autopista interestatal 89. En Pensilvania, los vientos y las ráfagas de nieve obligaron a emitir una advertencia por tormenta repentina a lo largo de la Interestatal 80.
En el Medio Oeste, la pequeña localidad de Ubly, en el “pulgar” de Michigan, registró cerca de 8 pulgadas (20 cm) de nieve. “Simplemente no paraba de caer”, relató Barbara Butch, empleada municipal y bibliotecaria del pueblo. Las ráfagas de viento bajaron la sensación térmica a niveles inusuales para esta época del año. Sin embargo, los meteorólogos prevén un ascenso de temperaturas hacia los 50 °F (10 °C) al final de la semana, lo que podría transformar el paisaje nevado en un “lodazal invernal”.






















