ORLANDO, Florida.- Un nuevo proyecto de ley presentado en Florida podría transformar las políticas educativas y migratorias del estado al prohibir que ciertas universidades y escuelas públicas admitan a migrantes indocumentados. La propuesta es impulsada por el senador estatal republicano Randy Fine.
La propuesta de un representante republicano de Florida para prohibir el ingreso la universidad a inmigrantes indocumentados
Un proyecto de ley en Florida propone prohibir la admisión de migrantes indocumentados en universidades públicas con una tasa de aceptación menor al 85%. La medida afectaría a miles de estudiantes indocumentados en Florida, que actualmente pueden acceder a matrícula estatal o exenciones, según datos del estado.

La medida fue propuesta después de que el gobernador de Florida, Ron DeSantis, convocara una sesión legislativa especial para implementar las políticas migratorias del presidente electo Donald Trump. El senador Fine, quien también busca un escaño en el Congreso tras la nominación de Mike Waltz como asesor de seguridad nacional de Trump, argumenta que la propuesta busca priorizar los intereses de los ciudadanos estadounidenses y residentes legales.
“¿Es justo permitir que un inmigrante ilegal ocupe un lugar que podría ser ocupado por un floridano o un estadounidense? Yo diría que no”, declaró Fine al presentar el proyecto el martes.
El proyecto prohibiría la admisión de estudiantes sin autorización legal en instituciones de educación superior con una tasa de aceptación menor al 85%. Entre las universidades que podrían verse afectadas se encuentran la Universidad de Florida, la Universidad Estatal de Florida, la Universidad Central de Florida y la Universidad Internacional de Florida, según sus datos de admisión.
Notas Relacionadas
¿A qué inmigrantes impacta esta propuesta de ley?
De ser aprobado, el cambio propuesto representaría un giro drástico en las políticas actuales del estado. Actualmente, los estudiantes indocumentados pueden calificar para la matrícula estatal en colegios y universidades públicas de Florida. Además, durante el ciclo escolar 2023-2024, aproximadamente 6,500 estudiantes sin estatus legal aprovecharon una exención que les permite evitar el pago de la matrícula fuera del estado, según datos del Instituto de Política de Florida.
Fine también presentó otro proyecto que busca eliminar dichas exenciones, lo que podría afectar aún más a esta población estudiantil. Florida alberga a aproximadamente 1.2 millones de migrantes indocumentados, según el Centro de Investigaciones Pew, lo que subraya el impacto potencial de estas medidas en la comunidad educativa y migrante.
La propuesta ha sido recibida con críticas de defensores de derechos de los migrantes y líderes educativos. Gaby Pacheco, directora de TheDream.US, una organización que ofrece becas a estudiantes inmigrantes sin documentación legal, calificó la medida de “perjudicial” y “contraproducente”.
“No estamos viendo como floridanos el impacto que va a tener cuando se está expulsando a personas que han estado aquí durante 10, 15 años”, comentó Pacheco. “ Este es su hogar”.
Por otro lado, DeSantis defendió la necesidad de endurecer las políticas migratorias para evitar que “persistan los incentivos para que las personas entren a nuestro estado ilegalmente”. Sin embargo, su convocatoria a una sesión legislativa especial ha generado tensiones incluso dentro de su partido. Algunos líderes republicanos del Congreso estatal calificaron la medida como “prematura” e “irresponsable”.
“Esto no vino acompañado de un paquete robusto de proyectos de ley para que consideremos”, declaró Fine, quien, aunque apoya la agenda de Trump, criticó la falta de preparación en la iniciativa de DeSantis.
A nivel nacional, las políticas sobre estudiantes indocumentados varían considerablemente. Tres estados prohíben la inscripción de estudiantes sin documentación en ciertas universidades, mientras que alrededor de la mitad de los estados permiten que califiquen para matrícula estatal, según el Centro Nacional de Leyes de Inmigración.
El debate en Florida podría tener repercusiones más amplias, dado el apoyo público de Trump a la medida. “ ¡Esperemos que otros gobernadores sigan su ejemplo!”, escribió Trump en redes sociales, agradeciendo a DeSantis por su liderazgo.
Mientras tanto, el destino de miles de estudiantes indocumentados en Florida pende de un hilo, en un momento en que las instituciones educativas enfrentan un declive en las matrículas. La sesión especial programada para la semana posterior a la toma de posesión de Trump promete ser un escenario clave en este debate.
Con información de AP.

































