ORLANDO, Florida.- Una exgerente de un restaurante Wingstop en Florida Central fue arrestada luego de que, según la policía, arrojara grasa caliente y aderezo ranch a clientes en medio de una fuerte discusión dentro del establecimiento.
Les lanzó grasa caliente: El momento en que una empleada de Wingstop reacciona contra los clientes
La discusión entre la gerente y los clientes escaló rápidamente, terminando en un acto violento cuando la empleada arrojó grasa caliente en respuesta a la confrontación. El incidente quedó registrado en video, mostrando cómo la tensión aumentó hasta que la gerente tomó la grasa caliente y la lanzó hacia los clientes del restaurante.
Por:Univision
Video Caos en Wingstop: gerente pierde el control y ataca a clientes con grasa hirviendo
El incidente ocurrió el pasado 28 de enero en una sucursal ubicada en la ciudad de Port St. Lucie. De acuerdo con información proporcionada por la policía local, la gerente del establecimiento, Carnael Irene, de 19 años, fue arrestada y enfrenta cargos por abuso infantil agravado y agresión agravada, ya que una de las clientas agredidas es menor de edad.
Según el informe policial, la disputa comenzó cuando un grupo de clientes ingresó al restaurante y, en determinado momento, se produjo un altercado verbal con la gerente.
El video de las cámaras de seguridad muestra cómo la discusión se tornó cada vez más acalorada, lo que llevó a Irene a rociar una sustancia sobre los clientes. Poco después, una de las clientas agredidas arrojó un contenedor de popotes hacia el área de servicio, lo que aparentemente provocó que Irene tomara una sartén con grasa caliente y la lanzara en dirección a los clientes.
Una discusión verbal que escaló a la violencia física
Las imágenes captadas en un video muestran los momentos de tensión vividos dentro del restaurante. En el material, se observa cómo Irene y los clientes intercambian palabras antes de que la gerente decida rociarles una sustancia. La situación escala rápidamente cuando uno de los clientes responde lanzando el contenedor de popotes, lo que desata la reacción violenta de Irene, quien regresa con la grasa caliente y la arroja directamente hacia el grupo.
Tras los hechos, la policía fue alertada y llegó al lugar para realizar la detención de Irene. De acuerdo con las autoridades, la joven admitió haber atacado a los clientes, pero justificó su acción al alegar que estos estaban causando disturbios en el establecimiento.
Las acusaciones contra Irene incluyen cargos de abuso infantil agravado y agresión agravada.
El caso ha generado indignación y preocupación entre los residentes de Port St. Lucie, quienes han expresado su asombro ante la reacción de la gerente y la gravedad del incidente. Hasta el momento, no se ha informado sobre el estado de salud de las personas afectadas ni si estas presentarán cargos adicionales en contra de la exgerente.
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