Desde Jersey Shore, en Atlantic City, el movimiento turístico es una garantía. Sin embargo, este fin de semana los negocios se vieron desolados por el paso de la tormenta Ophelia, que tocó tierra en la isla Esmeralda, de Carolina del Norte.
Tormenta Ophelia afecta negocios de hispanos: "Se pierde un montón"
La encargada de un local de comida en Jershey Shore, Atlantic City, llamada Susana, lamentó las pérdidas económicas que implica un fin de semana azotado por la tormenta Ophelia.

En el área triestatal, el fuerte oleaje obligó a mantener un aviso de emergencia, al menos hasta las 8:00 de la noche de este domingo. Así están las calles en los pueblos costeros de Nueva Jersey.
Y es que las ráfagas de viento y riesgos de inundaciones invitan a quedarse en casa, lo que afecta significativamente a los negocios de hispanos.
"Hoy no hacemos nada", dice una comerciante de Atlantic City
"Ahorita estamos mal. Ya voy a cerrar, temprano (4:00 pm), porque no hay negocio y no hay nada en las tablas", expresó Susana, encargada de un local de comida en Jersey Shore, el sábado.
Para el domingo, afirmó que abrirían "un rato, a ver qué pasa", pero pronosticó que podrían cerrar a la misma hora del sábado.
Cuando le preguntan por las pérdidas económicas que implica no poder trabajar con normalidad un fin de semana, en medio de los estragos de la tormenta Ophelia, señala: "Se pierde un montón".
"Aquí hacemos una comida riquísima, los mejores desayunos de Atlantic City, pero hoy no hacemos nada", se lamentó la mujer latina.
Los Guardianes del Tiempo han monitoreado desde la mañana de este sábado las lluvias que causa la tormenta Ophelia en Nueva York, Nueva Jersey y Connecticut.
La mayor parte de las precipitaciones ocurren al sur de Nueva Jersey, aunque Long Island y la parte central de Nueva York también se han visto afectadas por las lluvias.
Debido a la situación meteorológica, los aeropuertos JFK y LaGuardia han presentado retrasos en sus vuelos, aunque continúan operativos. Por su parte, el aeropuerto de Newark, en Nueva Jersey, es el que más se ha visto afectado por retrasos y cancelaciones.
