NUEVA YORK. –– El número de estadounidenses que se ponen la vacuna contra el covid-19 se ha reducido en las últimas semanas y Nueva York no es la excepción.
Menos personas se están vacunando contra el covid-19 en Nueva York, ¿a qué se debe?
Según datos recientes del Departamento de Salud, el número de neoyorquinos que recibieron la primera dosis de la vacuna se desplomó en las últimas semanas, una tendencia que coincide con el resto del país.

Según datos recientes del Departamento de Salud, el número de personas que recibieron la primera dosis de la vacuna se desplomó en las últimas semanas en la ciudad, sumando unas 136,710 personas en el grupo de 16 años o más.
Se trata de un 67% menos de las 410,917 personas que se vacunaron durante la semana que va del 4 al 10 de abril, una cifra récord para la Gran Manzana, según reportó el New York Post.
El descenso coincide con un declive nacional, que ocurre paralelamente al anuncio por parte de las autoridades de salud de una pausa en la aplicación de la vacuna de Johnson & Johnson, debido a reportes sobre efectos secundarios peligrosos.
El New York Times informó de que la pausa de 11 días de la vacuna de Johnson & Johnson es en parte responsable del descenso del número de vacunaciones, pero los datos también muestran una ralentización en la administración de las vacunas de Pfizer y Moderna. El mismo informe indica que el número no se ha recuperado del todo desde entonces.
Este declive ha estado más presente entre las personas de 18 a 64 años, según datos de los CDC. Este grupo se volvió elegible para vacunarse en la mayoría de los estados el mes pasado y se estima que más del 50% de sigue sin vacunarse.
Por otra parte, una encuesta reciente de The Harris Poll descubrió que alrededor del 10% de los estadounidenses no se oponen a vacunarse, pero no tienen prisa para hacerlo. Esta respuesta fue más común entre los adultos jóvenes.
En total, se estima que un 55% de los residentes de la ciudad se han vacunado al menos una vez, según cifras de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
Sin embargo, esta cifra varía bastante entre grupos demográficos: solo un 12.5% de hispanos han recibido al menos una dosis de la vacuna, y un 8.8% de personas afroamericanas. En cambio, un 63.4% de las personas vacunadas al menos una vez son blancas.
Algunos expertos en salud y funcionarios dicen que hay mucho trabajo por hacer para convencer a la población a vacunarse.
“Lo que se está haciendo no es suficiente”, dijo Mark Levine, presidente de la Comisión de Salud del concejo municipal, sobre los esfuerzos de la ciudad de Nueva York en este tema.
La ciudad ha implementado campañas publicitarias y otros programas, buscando aumentar la vacunación ante el incremento de actividades sociales por la eliminación de las restricciones que se avecina. Pero Levine opina que se debe hacer más.
“El médico del vecindario debería poner la inyección igual que hace para la vacuna de la gripe y debería estar en todas las farmacias sin cita previa, hay que ir donde esté la gente, donde viven, en sus iglesias”, dijo Levine.
Tara Kirk Sell, de Johns Hopkins, opinó también que mensajeros confiables como los médicos y líderes de iglesias podrían ser útiles para persuadir a personas que aún dudan y no confían en las vacunas.
Hacer que las tomas sean convenientes es también una de las mejores maneras de llegar a ellas, dijo Kirk Sell a Axios.
“Hay que convencerles... o hay que llevarles [la vacuna] a un lugar que les resulte más conveniente”, agregó.




























