“No hay un día que no llore”, dice enfermera, mientras repuntan las hospitalizaciones por coronavirus

CHAPEL HILL, Carolina del Norte.- Siete meses después de que la pandemia del coronavirus comenzara a abrumar al sistema hospitalario, el personal de enfermería del Hospital de la Universidad de Carolina del Norte (UNC) en Chapel Hill continúa atendiendo a pacientes en estado crítico dentro de su Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).

Señalada como "la dirección equivocada" por autoridades estatales, Carolina del Norte reportó el martes más de 1,200 hospitalizaciones por coronavirus, la cifra más alta registrada desde finales de julio. Mientras al menos 10 estados en EEUU han visto un "alarmante incremento" en las estadísticas, los trabajadores de la salud llaman a no bajar la guardia.

Loc Culp, gerente de servicio al paciente de UNC, dice que su personal trabaja las 24 horas para atender a los pacientes con coronavirus.

"Todos hacen turnos de 12 horas. Entonces, en un turno de 12 horas usan Equipos de Protección Personal (PPE) entre nueve y once horas al día", dijo Culp a Associated Press.

A lo largo de septiembre, las cifras de covid-19 se mantuvieron estables en Carolina del Norte; sin embargo, desde la semana pasada el estado reportó días consecutivos con récords de casos diarios. El personal de Culp se está preparando para atender a nuevos pacientes.

A ella le preocupa lo que podría suceder si los estadounidenses comienzan a bajar la guardia y dejar a un lado las medidas preventivas; tales como el uso de mascarillas, el distaciamiento social y el lavado constante de las manos.

"Es real. Es muy real. Hemos visto morir a muchos pacientes a causa de esto", confesó la gerente de UNC.

La pandemia de coronavirus también ha cambiado la vida de Collin Stage, quien se desempeña como enfermero en el Hospital UNC. Las restricciones de visita lo han llevado a ejercer múltiples roles, mientras los pacientes permanecen aislados de sus seres más queridos.

"Creo que sólo hace falta que un miembro de la familia esté en el hospital para saber que quieres estar allí de inmediato, pero ahora las personas que los cuidan dicen que debes quedarte en casa", agregó Stage.

Para millones de los trabajadores de primera línea, la pandemia los ha llevado a sostener una gran carga sobre sus hombros.

"Probablemente, no hay un día que no llore. Me sentaré en mi oficina y lloraré. Pasarán unos minutos, saldré y estaré bien", dijo Culp.

Desde el inicio de la pandemia, unas 200,000 personas han muerto por covid-19 en Estados Unidos.

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