La tarde de este domingo, miles de personas acudieron al estadio State Farm, en la ciudad de Glendale, Arizona, para despedir al activista conservador Charlie Kirk, quien fue asesinado el pasado 10 de septiembre en la Universidad Valley, en Utah. En el recinto se reunieron casi 70,000 personas; los espectadores adicionales fueron enviados a un lugar cercano. El presidente Donald Trump estuvo presente y fue ovacionado por la multitud.