MIAMI, Florida.- Queda menos de un mes para las elecciones primarias del Partido Republicano en las que elegirán al candidato que los representará en la carrera para la gobernación de Florida. La lista de precandidatos asciende a 8, pero naturalmente los ojos están puestos sobre los dos que llevan la delantera: el comisionado Adam Putnam y el representante Ron DeSantis.
Poco conocido, pero con apoyo presidencial: cómo Trump alteró la suerte de los aspirantes republicanos a gobernador de Florida
Los ojos están puestos sobre los dos que llevan la delantera: el comisionado Adam Putnam y el representante Ron DeSantis. Y aunque el primero tiene una amplia carrera en la política estatal, cada vez más votantes se inclinan por su oponente, quien también es el favorito del presidente.

En los papeles, todo favorecía a Putnam, más conocido dentro del estado en el que ha desarrollado su carrera política. Pero el presidente Donald Trump se convirtió en un factor en la carrera al ponerse del lado de DeSantis. La semana pasada viajó a Tampa para participar en un evento de campaña promocionandolo.
La popularidad de DeSantis no ha hecho sino subir en las últimas semanas y el empujón de Trump puede ser determinante en la contienda del GOP.
De acuerdo con una encuesta de la última semana de julio de 'Florida Atlantic University', 36% de los encuestados votaría por DeSantis, mientras que 27% lo haría por Putnam. El resto de los candidatos no obtuvieron más de 3% de intención de voto, y otro 23% todavía está indeciso.
A principios de año, Putnam llevaba la delantera. Hace apenas dos meses, esta misma medición calculaba el apoyo a DeSantis en 16%, mientras que Putnam tenía solo un punto por debajo. Entonces, 43% de los electores aún estaban indecisos.
El apoyo formal de Trump no es de subestimar en un estado que los últimos casi 20 años ha elegido a republicanos para gobernador. Y DeSantis lo tiene claro, apenas Trump le alzó la mano, no tardó en agregar la frase “Avalado por el presidente” en la descripción de sus cuentas de Twitter y Facebook, y en las biografías de sus páginas oficiales.
Congressman Ron DeSantis, a top student at Yale and Harvard Law School, is running for Governor of the Great State of Florida. Ron is strong on Borders, tough on Crime & big on Cutting Taxes - Loves our Military & our Vets. He will be a Great Governor & has my full Endorsement!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) June 22, 2018
“El congresista Ron DeSantis, un estudiante destacado en Yale y la escuela de Leyes de Harvard, está postulándose para gobernador del gran estado de Florida. Ron es fuerte en fronteras, duro contra el crimen y grande recortando impuestos. Ama a nuestros militares y nuestros veteranos. ¡Será un gran gobernador y tiene todo mi apoyo!”, escribió el presidente en enero.
En ese momento la suerte de Putnam empezó a cambiar.
“Es difícil entrar en las mentes de los electores, pero creo que la gente está viendo a Putnam como alguien que no apoyó al presidente para ser el candidato republicano en 2016”. afirmó Ninoska Pérez Castellón, periodista y comentarista de Radio Mambí en Miami (filial de Univision),
Uno, más conocido que otro
Ambos precandidatos tienen un perfil conservador muy parecido. Desde 2010 Putnam es comisionado de Agricultura, por lo que es más conocido a escala estatal. DeSantis, en cambio, es una figura con la que muchos electores no están familiarizados, aunque desde 2013 representa el Distrito 6 del estado en el Congreso en Washington DC.
Su nombre cobró más prominencia en 2017 por sus frecuentes ataques contra la investigación del abogado especial Robert Mueller sobre la interferencia rusa en las elecciones de 2016, el llamado ' Rusiagate'.
Para el profesor Kevin Wagner, jefe del departamento de ciencias políticas de FAU, el apoyo de Trump a DeSantis es muy importante para darle notoriedad al no muy conocido precandidato.
"Le dio un impulso al reconocimiento de su nombre en la cobertura nacional y estatal. Eso es muy importante en un estado tan grande como Florida", indicó.
Cuando le preguntaron a Putnam en una entrevista de Fox News por qué el mandatario decidió apoyar a su oponente por encima de él, a pesar de que ambos son republicanos conservadores, sugirió que todo se trataba de “la política de Washington”.
"Ciertamente el congresista DeSantis se mueve muy bien en las esferas de Washington, pero yo estoy centrado en Florida", comentó, e insistió que apoya a Trump tanto como lo hace DeSantis.
Para el profesor Wagner, el apoyo de Trump a DeSantis además "ayuda significativamente en la recaudación de fondos, que también es vital en un estado tan grande".
Un apoyo que pasa factura
Algunos republicanos todavía tienen fresco en la memoria que Adam Putnam no secundó a Trump en la carrera por la postulación del partido para las presidenciales de 2016.
"Recordemos que Putnam no apoyó a Trump en ese momento. Ahora curiosamente, los panfletos de Putnam llevan la foto de Trump. Esa es la política", explica Pérez Castellón.
Antes de recibir el visto bueno del presidente, DeSantis ya contaba con otro soporte muy fuerte: el del gobernador Rick Scott, quien ahora compite para el Senado federal.
Todo indica que DeSantis puede ganar la deseada nominación, aunque para algunos no esté bien preparado. Un editorial del prestigioso periódico The Tampa Bay Times, asegura que De Santis "ha demostrado poca comprensión de la política estatal o de los desafíos que enfrenta este estado".
El diario llamó a los republicanos de Florida a "ver más allá de los tweets del presidente, ya que están eligiendo entre el conservador más conocido y el sabor más reciente y novedoso de un jugo".
Se acercan las primarias
Aunque FAU no ha medido el efecto del endoso de Trump en otras carreras estatales, está claro que la influencia del presidente entre la base republicana es bastante sustancial.
"Estos tienden a ser los votantes de las primarias. Por eso, la influencia del presidente en estas elecciones es muy alta, especialmente cuando los candidatos no están ya firmemente establecidos en la mente de los votantes", explica Wagner.
Los números indican que, mientras más se acerca la elección, tiende a bajar también la cifra de indecisos.
"Los altos niveles de incertidumbre son típicos cuando aún falta mucho tiempo, así como la limitación en el reconocimiento de los no mbres de los candidatos", dijo el profesor encargado de las encuestas de FAU.
El fuerte apoyo de Trump a su candidato también puede ser considerada una apuesta arriesgada para los republicanos en noviembre.
Wagner apunta que si bien el apoyo del presidente puede ser decisivo en la primaria, podría ser negativo en las elecciones generales ya que los votantes demócratas e independientes pueden tener más rechazo a un candidato tan asociado con Trump.
Algo a tomar en cuenta, considerando que, de acuerdo con esta encuesta, el presidente tuvo una pequeña caída en su índice de aprobación en Florida, que es del 41%, dos puntos menos que en mayo, cuando disfrutó su mayor respaldo entre los votantes del estado desde que asumió el cargo. Por su parte la calificación de desaprobación del mandatario es de 47%.
Aunque Trump le ganó a Hillary Clinton el estado en 2016, para una elecciones de mitad de período, un candidato tan asociado a él puede terminar sufriendo el tradicional efecto péndulo que hace difícil de predecir las elecciones en Florida.
Vea también:







