Mandó a reparar unas tabletas esenciales para sus hijos autistas, pero terminó sin dinero y sin arreglo
El pasado 27 de febrero, María Figuera fue hasta un establecimiento en Hialeah para que le ayudarán con los aparatos electrónicos que usan sus hijos como herramienta clave de aprendizaje. Sin embargo, y tras pagar más de 290 dólares, el técnico desapareció sin cumplir con su labor.
Mandó a reparar unas tabletas esenciales para sus hijos autistas, pero terminó sin dinero y sin arreglo
El pasado 27 de febrero, María Figuera fue hasta un establecimiento en Hialeah para que le ayudarán con los aparatos electrónicos que usan sus hijos como herramienta clave de aprendizaje. Sin embargo, y tras pagar más de 290 dólares, el técnico desapareció sin cumplir con su labor.