La policía de Sweetwater, en Miami-Dade, tomó fotos de lo que encontró en la casa en donde arrestó a los padres de un bebé, que estaba viviendo entre heces y orina. Francisa Leal, de 28 años y Rafael Osmany Naranjo, de 25 años, negaron que su hijo “estuviera sucio” y aseguraron que un vecino les daba agua.