Habitantes del área estuvieron en alerta luego de evidenciar que había maquinaria pesada trabajando sobre el terreno, por lo que interpusieron una queja. A través de Twitter, el condado de Miami-Dade afirmó que se trataba de la remoción de árboles invasivos y que se estaba monitoreando el proceso. Esto ocurre luego de que se venciera el plazo para que la alcaldesa Daniella Levine Cava vetara el proyecto de construcción.