Convertirse en rastreador de contacto: una opción de empleo que ayuda a controlar el coronavirus

Muchos de los lugares que han logrado ganarle la batalla al coronavirus han tenido acceso a un gran número de pruebas, y también a un programa fuerte de rastreadores de contacto.

Los expertos coinciden en que este programa es crucial para poder controlar la pandemia del covid-19 y entre las instituciones del sur de Florida que están ofreciendo cursos para llevar a cabo este trabajo, se encuentra la Universidad Internacional de Florida, FIU.

“Ya después que una persona tiene el virus, es importante saber cuáles han sido sus contactos, pues con uno solo que haya sido contagiado, dos o tres personas más pueden ser afectadas”, comentó la doctora Eneida Roldán, directora ejecutiva de la red de atención médica de FIU.

FIU, en asociación con la ciudad de North Miami, desarrolló un programa de capacitación gratuito de dos meses, para los residentes de esa ciudad que deseen trabajar como rastreadores de contacto. En total son 60 participantes y la doctora Roldan agrega que no se trata de un voluntariado, sino que es un trabajo remunerado que puede ser una alternativa para las personas que perdieron su empleo, por la pandemia del covid-19.

El Hospital Larkin en Hialeah también ofrece un curso gratuito para entrenarse como rastreador de contacto, aunque no para trabajar directamente con el estado, que es la única entidad autorizada para hacerlo oficialmente.

Sin embargo, Jack Michel, director de docencia del Hospital Larkin, indica que quienes hagan el curso pueden aplicar para un trabajo con el estado.

Y aunque el trabajo es tedioso y cada llamada puede tardar unos 20 minutos, es de gran ayuda para descubrir los lugares donde se esconde el coronavirus.

En Florida hay unos 4,000 rastreadores del estado, una cifra que no es suficiente para la gran cantidad de personas contagiadas con el covid-19. El miércoles, el estado sobrepasó el medio millón de casos de coronavirus, por lo que se necesitarían unos 15,000 rastreadores de contacto.

Los expertos también advierten que si un rastreador lo llama, colabore, pero tenga cuidado de no caer en trampas.

Tenga en cuenta que quien lo llame no le puede cobrar por esto, ni pedirle su información de seguro de salud ni de seguro social, ni ningún dato diferente al nombre y la fecha de nacimiento. Y por supuesto, los contactos que ha tenido en las últimas dos semanas.

Esta información, además, está protegida como cualquier historial médico.