Un padre y su hija ayudan a esclarecer el caso de la bebé muerta en la autopista 405 de California

LOS ÁNGELES - A las 3:40 de la mañana del lunes, la hija de Richard Berglund escuchó a sus vecinos discutiendo a gritos. Cuatro horas después, su colaboración y la de su padre fueron clave para esclarecer el caso que involucra el hallazgo de una bebé muerta y otra niña herida, en la autopista 405, en Culver City.

En inglés, la joven contó a Univision 34 Los Ángeles que pasadas las 7:00 a.m., cuando salió a trabajar, notó que la puerta del apartamento de sus vecinos en Woodland Hills estaba abierta. Había mucha sangre y rastros en el pasillo y en el elevador. De inmediato le avisó a su padre.

"Algo no está bien", fue lo único que Richard Berglund recordó haber dicho en su llamada al 9-1-1. Desde afuera, lamentó, su vecino parecía estar inconsciente, en la cocina, porque veía parte de sus piernas.

Mientras la policía se dirigía al complejo Montecito Apartments, en el 6200 de la avenida Variel, la operadora del servicio de emergencias le pidió que entrara al apartamento y revisara la condición de la persona. "Fue ahí cuando vi el cuerpo, boca abajo, con mucha sangre", comentó Berglund.

El hombre, apuñalado, solo tenía medias y ropa interior.

Detectives del Buró de Homicidios de Valley comenzaron la investigación, sin saber que una bebé hallada muerta en la autopista 405 y la otra niña rescatada, habrían salido horas antes de ese mismo apartamento en Woodland Hills.

Faltaban la madre y las dos niñas

Richard Berglund mantenía una relación cordial con sus vecinos del quinto piso. Intercambiaban saludos, pero "eran muy privados, no hablaban mucho", contó el padre de familia a Univision 34 Los Ángeles.

Tanto él como su hija dieron testimonio de que sus vecinos discutían con frecuencia. Sabían que una mujer y dos niñas vivían junto al hombre asesinado. ¿Dónde estaban?

A esa hora, ya la Patrulla de Caminos de California pedía ayuda de la ciudadanía para saber cómo una bebé y otra niña habían llegado a la autopista 405, en Culver City, California.

Una llamada de emergencia, a las 4:25 a.m., los llevó a carriles cercanos a la salida al bulevar Sepúlveda con Howard Hughes Parkway. Allí recuperaron el cuerpo sin vida de una bebé de 8 meses y rescataron a una niña de 9 años herida.

Un testigo mencionó que un auto oscuro había sido visto cerca de las niñas.

¿Accidente o suicidio en Redondo Beach?

Oficiales de la Patrulla de Caminos de California atendían la escena en la autopista 405, cuando en Redondo Beach se reportó un accidente mortal.

A las 4:59 a.m., paramédicos del Departamento de Bomberos declararon muerta en la escena a la conductora de una camioneta Porshe Cayenne oscura que se estrelló, a sobre 100 millas por hora, contra un árbol, en la intersección de la calle Vincent y Pacific Coast Highway.

El detective Scot Martin, de la policía de Redondo Beach, quedó a cargo de la investigación.

Pero ese incidente que parecía un accidente, lejos estaba de serlo.

Las cámaras de seguridad de Montecito Apartments, en Woodland Hills, captaron cuando la vecina de Richard Berglund abandonó el lujoso complejo residencial, antes de las 4:00 a.m., junto a sus dos hijas.

Tenía tanta prisa por salir que con su camioneta Porshe Cayenne forzó el portón eléctrico del garaje del edificio.

Al buscar ese vehículo, los detectives de Valley hallaron respuestas en Redondo Beach.

En horas de la noche del lunes, el Departamento de la Policía de Los Ángeles confirmó que investigaban el vínculo entre los tres incidentes.

Un día después, agregó que agentes recuperaron un cuchillo "con evidencia".

Hermana de la bebé queda protegida

La teoría que comparten el Buró de Homicidios en Valley y la Patrulla de Caminos de California, es que al amanecer del lunes 8 de abril, Danielle Cherakiyah Johnson, de 34 años, apuñaló a su pareja, Jaelen Allen Chaney, de 29.

Después, la mujer abandonó a toda prisa Woodland Hills con sus dos hijas. Cuando estaba cerca de Culver City, las arrojó de la camioneta a la autopista 405. Y un poco más adelante, aceleró su Porshe lo más que pudo para impactar un árbol, muriendo en el acto.

Además de diversas pruebas y los testimonios de vecinos y otros testigos, las autoridades podrían contar con la información que pudiera ofrecerles la niña de 9 años que sobrevivió, con heridas físicas "moderadas" a una noche de horror.

Solo ella podría saber por qué su mamá decidió acabar con las vidas de su pareja, de su hermana bebé e incluso la suya.

La menor fue trasladada inicialmente al hospital para niños de UCLA, quedando bajo la protección del estado de California, por el momento.

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