LOS ÁNGELES, California.- Los investigadores del accidente de autobús que se cobró la vida de 13 personas el 23 de octubre cerca de Palm Springs no han determinado aún cuál fue la causa del siniestro, según se desprende del informe preliminar publicado este martes.
Sigue sin conocerse la causa del accidente de autobús que dejó 13 muertos en Palm Springs
Un informe preliminar publicado este martes, más de dos meses después del siniestro en la autopista 10 en el sur de California, constata que los investigadores aún no han logrado aclarar qué pasó.

El incidente ocurrió cuando un autobús de la empresa USA Holiday que viajaba rumbo a Los Ángeles por la autopista 10 con 43 personas a bordo se incrustó en la parte trasera de un tráiler.
Doce pasajeros fallecieron, lo mismo que el conductor, Teodulo Elías Vides, de 59 años, quien era también el propietario de la compañía de transporte. Todas las víctimas mortales, menos una, eran hispanas. Otras 30 personas resultaron heridas, entre ellas el chofer del camión.
El choque tuvo lugar a las 5:17 de la mañana de aquel domingo 23 de octubre cuando el autobús viajaba de regreso a Los Ángeles después de un viaje relámpago al casino Red Earth, en Thermal, donde los pasajeros llegaron alrededor de la medianoche y estuvieron apostando durante la madrugada.
El reporte del Consejo Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) indica que “varios minutos antes del choque” se formaron unas retenciones en la autopista como resultado de los trabajos de instalación de cableado que la compañía eléctrica Edison estaba realizando en ese tramo de vía. Esa tarea estuvo supervisada por la Patrulla de Caminos de California (CHP).
Durante la investigación se usaron sistemas de escáner láser en 3D en el camión y el autobús, aunque el caso sigue abierto hasta que NTSB determine la causa probable del siniestro.
Tras el accidente, algunos usuarios de esa compañía de transporte contaron a Univision Noticias que el chofer solía dormitar al volante y que era habitual que el autobús se moviera de forma errática, incluso invadiera otros carrieles en esos viajes nocturnos.
Notas Relacionadas

Los clientes del autobús siniestrado aseguran que el chofer solía dormitar al volante
Los investigadores de NTSB determinaron inicialmente que 6 de las 8 llantas del autobús estaban demasiado gastadas y que no cumplían con las normativas de circulación, aunque hasta el momento no se ha señalado esto como un factor en el choque.
La diferencia de velocidad entre el camión y el autobús jugó un papel en la colisión, aunque tampoco ha trascendido si alguno de los vehículos estaba incumpliendo alguna regulación de tránsito. En ese punto de la autopista el límite de velocidad está en 70 millas por hora para el tráfico general y 55 para camiones con remolque.
Las familias de las víctimas han puesto dos demandas al chofer y a su compañía por el accidente.
Notas Relacionadas






