LOS ÁNGELES, California.– Varios clientes de Edgardo Guerrero, quien presuntamente se hizo pasar por un abogado de inmigración y durante 30 años tuvo la misma oficina en Los Ángeles, le pagaron miles de dólares, pero sus trámites jamás fueron aprobados por el Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS). En los peores casos, algunos no solo perdieron su dinero, sino que terminaron enfrentando procesos de deportación, según el Departamento de Asuntos del Consumidor del condado de Los Ángeles.
Si te ayudó este falso abogado de inmigración puedes estar en riesgo de deportación
Las autoridades de Los Ángeles buscan a más víctimas de Edgardo Guerrero, un hombre que se presentaba como abogado especializado en leyes migratorias para defraudar a indocumentados. La Fiscalía estatal de California asegura que ninguna de sus víctimas obtuvo documentos migratorios. "Estas personas no solo perdieron sus ahorros, sino que también están enfrentando la deportación".

"Durante el arresto y el cateo del negocio se encontraron cientos de expedientes de personas que pudiesen ser víctimas", dijo Rigoberto Reyes, especialista de esa dependencia, que ahora busca a más perjudicados por este hombre y su negocio, Oficina Guerrero, en la ciudad de Inglewood.
"Estas personas no solo perdieron sus ahorros, sino que también están enfrentando la deportación", agregó el funcionario.
Guerrero, un salvadoreño de 68 años, fue arrestado el pasado 22 de marzo acusado de varios cargos criminales, incluido robo de mayor cuantía, la práctica ilegal de la abogacía y por ofrecer de servicios de asesoría de inmigración sin tener un seguro. Este hombre salió libre tras pagar una fianza de 80,000 dólares.
Decenas de quejas contra este acusado se han interpuesto en el condado angelino, pero las autoridades creen que hay más víctimas que ni se han enterado de la detención de Guerrero y quizás tampoco sepan que sus trámites migratorios terminaron mal.
La fiscalía estatal, que encabeza la investigación, no especificó cuántas personas fueron timadas por este sospechoso, ni desde cuándo él fingió ser un abogado especializado en casos migratorios.
"Yo le di 5,200 dólares"
Dos presuntas víctimas se han acercado a Univision 34 para denunciar que le entregaron miles de dólares a Oficina Guerrero pensando que se trataba de un despacho legal legítimo.
"Me dijo que en un lapso de siete meses yo podía obtener mi residencia (permanente)", contó Henry A. Aguilera, un salvadoreño que no sospechó que se trataba de un hombre que solo quería robarle. "Pensaba que él era abogado, pero resulta que no", lamentó.
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Una mujer –que pidió no revelar su nombre– relató que Guerrero se presentó como un auténtico litigante. Según ella, el acusado la saludó así: "Yo soy el abogado Edgardo Guerrero, a sus órdenes. Yo le voy a ayudar con su caso de inmigración".
A esta supuesta afectada también le prometió que en unos meses dejaría de ser indocumentada.
"Yo le di un total de 5,200 dólares y me dijo que con mucho gusto él podría llevar el proceso, que en menos de seis meses teníamos absolutamente todo: seguro social y la residencia en menos de siete meses", denunció la mujer, quien contó que jamás firmaron un contrato.
"Me siento muy frustrada", dijo ella, comentando que se animó a denunciar este fraude "para que salgan las demás personas a hablar".
Otro denunciante que se identifica como Sergio C. reportó ante el Buró de Buenos Negocios (BBB) que Guerrero le cobró a un pariente 1,000 dólares por ayudarle con un trámite migratorio, pero luego supo que jamás sometió los documentos al USCIS.
"Descubrimos que había cobrado los giros postales para gastos personales", aseguró. "Él (su familiar) fue a su oficina y le pidió que le devolviera el dinero y se negó. También se negó a devolver los documentos originales", agrega la queja.
De acuerdo con la acusación, Guerrero cobró millas de dólares por servicios legales para los que no estaba legalmente capacitado y "ninguna de las víctimas obtuvo el estatus legal".
Oficina Guerrero operó desde 1988 en el 436 W. Manchester Blvd, en Inglewood. Este martes, en la puerta principal estaba un letrero que decía: "Esta oficina está cerrada por procedimientos legales".